Aunque ya se conocía su existencia, e incluso se había visto su aspecto, ahora se hace oficial. Hablamos del Google Pixel XL, el móvil de gran pantalla creado por Google. Y no, no hablamos de ningún Nexus, como sucedía hasta ahora, sino de un modelo Pixel. Una nueva familia. Nuevos terminales que llegan preparados para disfrutar de la Realidad Virtual, y que según Google están diseñados por ellos tanto por dentro como por fuera para conseguir la mejor experiencia posible. Eso sí, sigue siendo HTC quien fabrica estos dispositivos. Aquí vamos a hablar del hermano mayor, el Google Pixel XL, que supera al Pixel normal solo en su tamaño de pantalla, que alcanza los 5,5 pulgadas.
Se trata de un dispositivo diseñado con gusto, aunque imita ligeramente al aspecto del iPhone. Sobre todo en su parte trasera, debido a las líneas curvas de las aristas. Eso sí, Google ha querido dar un toque personal a su teléfono, y ha incluido una porción de cristal en la parte superior trasera del dispositivo, alrededor del sensor de huellas dactilares. Un toque diferente al que hay que acostumbrarse, pero que no resta la sensación de acabado Premium del terminal, que está hecho en aluminio y cristal pulido. Todo ello pudiendo escoger entre el negro, el gris y lo que Google ha llamado muy azul (very blue) como edición limitada.
Echando un vistazo a su pantalla, encontramos un panel de 5,5 pulgadas, capaz de mostrar imágenes a una resolución máxima Full HD (1920 x 1080 píxeles). Su tecnología es AMOLED, por lo que muestra colores saturados y un buen contraste. Algo que consigue nitidez y definición.
Pero miremos en el interior, que es realmente lo interesante. Aquí encontramos un procesador Qualcomm Snapdragon 821 de cuatro núcleos. Eso sí, dos de ellos corren a una velocidad de 2,15 GHz, ofreciendo una buena potencia bruta para los procesos más pesados, mientras que los otros dos lo hacen a 1,6 GHz para ofrecer una respuesta rápida pero eficiente en las tareas sencillas. Lo acompañan nada menos que 4 GB de memoria RAM de tipo LPDDDR4. En conjunto, una potencia que desde Google aseguran que rompe récords, aunque habrá que probarlo en persona para cerciorarse de su fluidez. En cuanto a su capacidad de almacenamiento, llega en dos versiones: una con 32 GB se capacidad, y otra con 128 GB.
Aparte de esto encontramos un interesante apartado fotográfico. La principal, cuenta con un sensor de 12,3 megapíxeles. Eso sí, estos megapíxeles tienen un tamaño de 1,55 micras, lo que le permite capturar mayor cantidad de información y, por tanto, mejorar el detalle en fotos y vídeos. Además, su apertura es de f/2.0, consiguiendo buenos resultados en ambientes oscuros. Aunque lo más interesante es el tratamiento de toda esta información. Y es que este Pixel XL cuenta con tecnología HDR+ para lograr mejor calidad y contraste en situaciones lumínicas difíciles gracias al procesamiento que se hace de las fotos. También aseguran haber conseguido una velocidad de captura en la aplicación de fotografía sin parangón, y un modo de fotografía que toma diferentes instantáneas para escoger la más definida y con mayor calidad. En cuanto al vídeo, la presentación a mostrado un estabilizador de imagen más que eficaz para evitar la sensación de temblor. Por su parte, la cámara frontal o para selfies posee un sensor de 8 megapíxeles.
En cuanto a su conectividad, el terminal llega con lo nuevo y lo viejo, tal y como dicen en Google. Por un lado encontramos el puerto USB tipo C. Por otro, mantienen el puerto para auriculares Jack 3,5 mm. Además, llega cargado de sensores y con conectividad Bluetooth 4.2. No nos olvidamos de su lector de huellas Pixel Imprint, antes mencionado, y que se sitúa en la parte central superior del dorso del terminal. Por último, hay que hablar de su batería, que cuenta con tecnología de carga rápida capaz de dar hasta 7 horas de autonomía con solo 15 minutos de carga. Se trata de una batería de 3.450 mAh de capacidad.
Pero como los propios responsables de Google han comentado durante la presentación, lo importante de sus terminales Pixels no es solo la potencia o el diseño de sus componentes. También tiene mucho que ver su interior. Y es que Google lo ha diseñado de arriba abajo para incluir toda su tecnología y capacidades. Esto se traduce en la introducción del asistente de Google en el entorno del terminal. Una herramienta que ya se ha dado a conocer en la aplicación de mensajería Google Allo, y que ahora queda integrado directamente en el móvil. De esta manera es posible solicitar que el asistente realice tareas como consultar el correo electrónico, ver cuáles son las próximas citas de la agenda o incluso llamar o mandar un mensaje de WhatsApp a cierto contacto. Todo ello sin perder de vista las posibilidades del asistente a la hora de encontrar información en Internet con una sencilla pregunta de lenguaje natural, o incluso reservar en un restaurante sin realizar una llamada. Un asistente que, además, aprende del usuario cuanto más lo use, y que ha mejorado gracias a la integración con servicios como el traductor de Google y la tecnología de Inteligencia Artificial y redes neuronales artificiales que han desarrollado para reconocer frases y palabras y entender órdenes con contexto.
El Google Pixel XL también integra herramientas propias de Google como Google Fotos. De hecho, los usuarios que se hagan con este terminal disfrutarán de un servicio completamente gratuito e ilimitado incluso para las fotos y vídeos de resolución original que superen los límites de esta herramienta. Sin reducción ni pérdida. Aunque el punto clave de los móviles de Google es que siguen siendo los primeros en recibir las últimas actualizaciones del sistema operativo Android.
Como no podía ser de otra forma, es un terminal preparado para la Realidad Virtual de Google, Daydream. De esta manera es capaz de comunicarse inalámbricamente con las nuevas gafas diseñadas por la compañía. Y gracias a su potente procesador es capaz de ofrecer una experiencia inmersiva completa.
Ahora bien, toda esta tecnología y acabados tiene un precio. De momento Google solo ha que el Pixel XL saldrá al mercado norteamericano por 750 dólares, unos 680 euros. Así, es de esperar que el Pixel XL alcance los 700 euros en su conversión a la moneda europea. Aún no se conoce su fecha de venta para España.