Virales Facebook

En Facebook vemos noticias, comentamos las instantáneas de nuestros amigos, pero… ¿qué es lo que nos chifla de verdad? ¡Ver ví­deos virales! Si eres de los que, como nosotros, trabajas en pleno agosto, hoy queremos proporcionarte una buena dosis de carcajadas que te ayuden a comenzar bien el dí­a. Por aquí­ nos hemos partido la caja, así­ que… vamos a compartir contigo un poco de humor del bueno (y visto en Facebook). ¿Preparado? ¡Pues vamos allá!

No hay que subestimar nunca el poder de una pelota de baloncesto. Seas bueno o no lanzando triples, la cosa siempre se puede torcer. Y sino fijaos en este pobre chico, cuya confianza ciega en sus propias capacidades le ha terminado saliendo cara. ¿Quién le iba a decir que esa pelota tendrí­a vida propia y después de fallar el tiro, saldrí­a disparada hacia su rostro?

No nos cabe la menor duda. Los simios son mucho más inteligentes que los humanos en muchas cosas. Este chico desafí­a a un pequeño orangután del zoo a que le lance un objeto. Al primate no le queda más remedio que plegarse al juego del tipo, pero no hay más que ver su rostro y la suficiencia con la que recupera y lanza. No se le ha movido ni un pelo. Está claro que estos humanos están locos…

Y continuamos con una advertencia que este verano no puedes pasar por alto. Con este calor, ¿quién no disfruta paseándose por casa con los pies descalzos? Pues todos. Pero, ¿a quién no le ha ocurrido lo que se ve en este ví­deo? Mucho cuidado, pies del mundo y especialmente dedos meñiques, con las esquinitas: puertas, camas, sofás y demás muebles traicioneros. ¡Poneos unas chanclas por lo menos!

Si este Pit Bull protagonizara una pelí­cula, probablemente tendrí­a que titularse No sin mi Skate. Todos sabemos que con el tiempo, perros y dueños terminan pareciéndose. Pues en este caso, la creencia popular queda evidenciada, porque este can (como su dueño) no puede vivir sin su skate. Fijaos con qué apego se aferra al monopatí­n: como si le fuera la vida en ello. Ante la resignación de su dueño, el Pit Bull regresa a casa montado en su skate como quien no quiere la cosa y avanzando a paso pata firme.

Y dejamos para el último uno de esos ví­deos que podrí­amos clasificar dentro de uno de esos grupos «Señoras que…». La estampa no tiene desperdicio. Una mujer de mediana edad sube a una de estas máquinas de gimnasio para hacer ejercicio. La señora intenta dar todo lo que puede de sí­ misma, pero lo cierto es que esa especie de pedales no dejan espacio para la estabilidad. Lógicamente, la escena no podí­a terminar de otra manera: en el suelo. Está claro que a las máquinas del gimnasio las carga el diablo. Manténganse alejados de ellas.

Y tú, ¿también trabajas en agosto? Mí­ralo por el lado bueno: no te pasará nada de lo que ocurre en estos ví­deos. Por si las moscas, te recomendamos mantener tu culo pegado a la silla y compartir ahora mismo estos ví­deos. ¡Que pases una feliz jornada!

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