La startup de tecnología Ava ha desarrollado una pulsera inteligente que facilita el seguimiento de los periodos de fertilidad y pretende simplificar la vida a las mujeres que hasta ahora se veían obligadas a utilizar los termómetros o los cálculos de los días de la menstruación. El wearable se utiliza solo por las noches y detecta cambios en los niveles hormonales para identificar los periodos de ovulación.
En concreto, la pulsera es capaz de detectar si la mujer se encuentra en los periodos más fértiles, cuando hay más posibilidades de embarazo. Se trata de una idea simple que podría tener un impacto muy positivo en la vida de las parejas y que por fin empieza a estar a la venta después de haber contado con la inversión de 2 millones de euros por parte de varios grupos empresariales.
En un futuro, además, el dispositivo podría seguir avanzando para ofrecer detección automática de algunas condiciones de salud, como los ovarios poliquísticos.
La pulsera detecta automáticamente los periodos fértiles
Este wearable que quiere desarrollar Ava ofrece información sobre los periodos más fértiles de la mujer gracias al análisis de los cambios en los niveles de ciertas hormonas en el cuerpo, señales que permiten identificar los días en que el cuerpo se prepara para la ovulación y los días en que este proceso termina.
En concreto, el producto analiza la hormona LH urinaria y el metabolito de estrógeno y toda la información se recoge por la noche, de manera que no es necesario llevar la pulsera puesta durante el día.
De momento los resultados obtenidos en los ensayos son bastante prometedores, pero aún hay dudas sobre el porcentaje de eficacia real. Ava realizó un estudio clínico junto al Hospital Universitario de Zurich, en el que participaron 41 mujeres sanas de entre 20 y 40 años sin problemas de fertilidad. Las observaciones duraron alrededor de un año, lo que dio un total de unos 180 ciclos menstruales estudiados.
La pulsera inteligente de Ava consiguió detectar de media unos 5 días fértiles por ciclo en cada mujer, y logró una precisión del 89% en estos análisis. Está previsto que la tecnología detrás del wearable siga avanzando en un futuro para mejorar ese porcentaje de acierto y para incorporar otras funciones muy útiles en la prevención de la salud, como por ejemplo la detección de los ovarios poliquísticos.
Desde hace más o menos un año, la pulsera de monitorización de fertilidad de Ava ha estado disponible en preventa, y a partir de ahora ha salido a la venta oficialmente por un precio de 200 dólares (unos 180 euros).
Por ahora el público objetivo principal para los creadores de este proyecto es el colectivo de mujeres que que buscan los días óptimos para concebir hijos, pero el invento también podría convertirse en el futuro en una herramienta útil para las mujeres que deseen utilizarlo como anticonceptivo natural (para evitar tener relaciones en los días más fértiles) sin necesidad de llevar las cuentas de los días o de utilizar un termómetro.
Los detalles sobre el lanzamiento a gran escala de la pulsera de Ava llegan apenas unas semanas después de que conociéramos el test barato para detectar el virus del zika: otro gran invento que demuestra las casi infinitas posibilidades de la tecnología aplicada a la salud.
