La próxima generación de drones inteligentes ya está aquí. Una nueva ruta en la que los drones caben en un bolsillo, despegan desde tu manos, graban en 4k e incluyen funciones como el auto seguimiento. Una herramienta con la que hacerse los selfies más brutales.
Drones tan ligeros que ni siquiera son clasificados legalmente como tales, en una escurridiza interpretación de la ley para que la gente se adentre en el mundo del vídeopilotaje (o pilotaje fotográfico) sin pasar por formalismos.
Este es el caso del no-drone de la compañía Zero Zero, una startup estadounidense que ha lanzado su Hover Camera. Un producto que ni siquiera está en los estantes virtuales de los grandes centros comerciales online. Tan solo se puede adquirir a través de su página web y tras pasar por una lista de espera de duración indeterminada.
El furor del «auto-follow»
Varias son las funcionalidades de esta cámara voladora, pero sin duda la que más encandila a todos es la función de auto seguimiento. Sincronizando el dispositivo con tu smartphone puedes activar esta función hacer que el drone te siga o siga a la persona cuya cara has señalado. Una nueva forma de hacerse autofotos y vídeos.
La resistencia, la estabilidad en el vuelo, el despegue, su alta calidad en la toma de instantáneas y su fácil portabilidad hacen de la Hover Cámara un producto innovador dentro del sector de los drones.
Y es que al contrario que los competidores de su sector, Hover Camera despega directamente desde las manos del usuario sin necesidad de costosos despegues. Lo mismo se puede decir del aterrizaje, ya que es posible cogerlo directamente con la mano sin ningún riesgo para nuestra integridad. Ya que la Hover Camera tiene un recubrimiento de fibra de carbono que lo hace ultra ligero y a la vez protege a las aspas de cualquier elemento, incluidas nuestras manos.
Para ser un dispositivo de menos de 300 gramos, tiene un aguante considerable a los golpes recibidos durante el vuelo. Gracias a esa carcasa de fibra de carbono, ha superado varios test de torsión y caída libre.
A nivel fotográfico, hace vídeos en 4k y fotos de 13 megapíxeles. A la función auto-follow también hay que añadir un sistema de fotografía panorámica en 360 grados. Al igual que el filtro EIS (Electronic Image Stabilization), imprescindible para tomar buenas instantáneas durante el vuelo.
El precio de venta al público con el que la empresa americana comercializará esta cámara voladora es de aproximadamente 600 dólares. Aunque de momento lo único que puedes hacer es acceder a su página web y apuntarte a su lista de espera.
Lyly, resistente al agua
Pero Hover no está solo en el mercado. En el mismo régimen de lista de espera está Lyly, una autodrone más pesado que te sigue gracias a un pequeño dispositivo que te pones en el bolsillo. Perfecto para los que se quieran grabar practicando deportes extremos como snowboard, descenso en bicicleta de montaña o esquí fuera de pista en HD (1080p). Incluye la posibilidad de grabar a cámara lenta para dotar de más espectacularidad a tus vídeos.