El canon digital de España pasa a la historia. El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha anulado hoy esta normativa sobre derechos de autor que entró en vigor en nuestro país en el año 2012. Ahora, desde la Unión Europea, consideran que no se pueden financiar directamente desde los Presupuestos Generales del Estado las compensaciones económicas derivadas de los derechos de autor por las copias privadas que se hagan de los contenidos.
El modelo de la asignación desde los presupuestos ya existe en otros países, pero desde la Unión Europea consideran que el caso español es inaceptable porque no se garantiza que los autores cobren finalmente el dinero que les corresponde.
Más detalles sobre el canon digital
En 2012, en España, entró en vigor un particular sistema de canon digital procedente directamente de los Presupuestos Generales del Estado.
En concreto, el Estado destinaba una compensación anual para las entidades responsables de la gestión de derechos de autor, que a su vez se encargarían de repartir esas cantidades entre los titulares de esos derechos de propiedad intelectual. Esta idea despertó muchas críticas porque los pagos proceden directamente del bolsillo de todos los contribuyentes, ya que las compensaciones económicas salen de los Presupuestos Generales del Estado.
En su momento, una serie de entidades de gestión de derechos de autor pidieron al Tribunal Supremo que se anulara esta normativa, y a su vez el Tribunal Supremo elevó la consulta a las autoridades de justicia europea. A día de hoy, por fin, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea se ha pronunciado en contra.
Algo similar ocurrió ya hace años con el anterior (y polémico) canon digital, que exigía recaudar ciertas cantidades fijas de manera indiscriminada. Por ejemplo, la compra de CD o DVD vírgenes tenía que llevar un recargo para financiar las compensaciones de derechos de autor, sin importar la función que se le diera a esos discos. Es decir: si querías comprar un CD virgen para grabar tus propios documentos de texto, aun así estabas pagando una pequeña cantidad en el precio para financiar derechos de autor de otras personas porque ”“en teoría”“ utilizarías ese CD para hacer copias de contenidos con propiedad intelectual de terceros.
Finalmente, la justicia europea consideró que era ilegal imponer un canon indiscriminado y el sistema se sustituyó por la asignación presupuestaria que teníamos hasta ahora. A partir de hoy, con la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, será necesario encontrar nuevas soluciones.
¿Llega realmente el dinero a los autores?
El Tribunal de Justicia de la Unión Europea asegura que se puede permitir una financiación de las compensaciones a través de los presupuestos estatales (como ocurre ya en Estonia, Finlandia y Noruega), pero que es necesario garantizar que los autores reciben el dinero que les corresponde. Sin embargo, en el caso español, este nuevo canon digital solo ha servido para beneficiar exclusivamente a las personas, mientras que ha perjudicado a empresas y organizaciones.
