Debo reconocer que soy uno de esos fans del Age of Empires, mentiría si dijese que no me he pasado horas y horas jugando. Ayuda que hace muchos años trabajé en un cyber-café y matábamos las horas muertas jugando todo lo que podíamos a ese juego.
Pues bien, en una época marcada por la infinidad de juegos que tenemos al alcance de nuestra mano, desde PC, a consolas, pasando por teléfonos móviles y tablets emerge una gran opción como es Sparta: War of Empires. Se trata de un juego gratuito que podremos disfrutar desde nuestro navegador.
Este juego MMO de Plarium nos permite elegir entre varias opciones, desde jugar con otros usuarios, enfrentarnos a ellos o colaborar, hasta empezar de cero y emprender una carrera en solitario. Todo esto nos lo pone en bandeja el juego Sparta: War of Empires.
Una gran opción para nostálgicos del Age of Empires
Una vez entremos en el juego, nos trasladamos a Grecia, concretamente al siglo V a.C. Y nada más empecemos a jugar, será el mismísimo Leónidas el que nos explique los entresijos del juego. Sí, el protagonista de 300 nos guiará para darnos una explicación rápida de todo lo que tenemos en pantalla. Y es que todo vale para frenar al rey Jerjes.
Así es como seremos un Arconte, un líder de una ciudad que debemos hacer prosperar. Y es que como nos dicen en los primeros minutos de juego, nos hemos acomodado. Toca empezar creando una granja, posteriormente ir haciendo más edificios, reclutar soldados, mantener buenas relaciones con otras ciudades, crear acuerdos comerciales y como no podía ser de otra forma, evitar que los persas nos invadan.
Como decíamos antes, la primera parte del tutorial es crear una granja. Y es que necesitaremos tres recursos básicos: grano, bronce y madera. Así es como tendremos nuestras granjas, aserraderos, fraguas y graneros. Las primeras nos darán grano, y cuantas más tengamos, más generaremos.
Después de esto, nos tocará meternos en materia e ir creando nuestro campamento de infantería. Y es que todo lo que creemos necesitará los tres recursos básicos que hablábamos antes. El grano como coste de mantenimiento, la madera para nuestros edificios -tanto crear como mejorar-, y el bronce para las unidades militares.
Poco a poco iremos construyendo diversos edificios que según transcurra la partida se irán desbloqueando, como templos o academias. Todo edificio desbloquea además nuevas unidades para reclutar. Todo esto pasa por llegar a acuerdos con ciudades históricas, y para llegar a estos acuerdos tenemos que gastar recursos. Así que nuestra ciudad tiene que generarlos para poder ir llegando a cotas más altas.
Y es que según juguemos nos darán retos y misiones, que nos dan más recurosos y oro. Al principio, tendremos que ir creando los edificios que nos marca la partida -lógicamente, del más bajo al más alto-, pero poco a poco el listón sube al hacernos que nos enfrentemos a los malvados invasores, pedirnos que acudamos a saquear una ciudad y conseguir más acuerdos.
Todo esto será muy interesante cuando tengamos que ir a la guerra. Aquí los aliados serán clave para conseguir el éxito. Uniéndonos a más gente podremos ir ampliando nuestro mapa de gestión sobre Grecia. Y aquí es cuando podemos darle uso a nuestros espías, ofrecer alguna alianza interesante y hasta llegar a traicionarles. Todas nuestras decisiones nos definirán como gobernante.
En definitiva, Sparta: War of Empires es un juego muy interesante que además podemos disfrutar en perfecto castellano. Un juego totalmente gratuito y sumamente adictivo, que además tiene la opción de jugar contra nuestros amigos. Así que si eres un apasionado de la estrategia, definitivamente tienes que probar y dejar que Leónidas te guíe por el juego.
Sparta a dia de hoy ya no se puede considerar un juego Free to play, sino pay to win. Cada actualizacion incluye algo nuevo que comprar para avanzar en el juego sin esfuerzo sin estrategia, su espiritu original esta perdido. Un ejemplo claro de como se fastidia un juego por querer esprimirle mas de la cuenta. No recomiendo el juego (lo dice alguien que ha estado dos años)
Tambien la culpa de mi vicio de los juegos online se lo debo al gran age of empires 🙂