Si sois seguidores de Apple, ya sabréis que este año no tocaría lanzar un gran teléfono, si no una revisión del modelo actual que contaría con el apellido «S». Es cierto, que tras un lanzamiento en mayúsculas lo que llega de Cupertino 365 días después suele ser aburrido. Siempre suele tratarse de un iPhone prácticamente igual, exceptuando algún añadido extra. Parece, que la compañía querría cambiar esta tendencia, o por lo menos así lo aseguran desde KGI Securities, que suelen predecir con acierto ciertas informaciones sobre los productos de Apple.
En primer lugar, el informe reitera que el nuevo iPhone llegaría con la tecnología Force Touch. Este rumor no es nuevo, pero lo importante es que sigue cobrando fuerza en cada nueva información que podemos daros. En otras filtraciones se decía, que sólo contaría con esta tecnología el iPhone 6s Plus, probablemente no será así. Ya hemos podido conocer sus virtudes en el nuevo MacBook, presentado el pasado mes de marzo. También está presente en el Apple Watch y es muy probable que también la integren en el próximo iPad Pro. Gracias a ella se pueden realizar diferentes acciones según la presión que se ejerza sobre la pantalla.
Por otro lado, el informe de KGI confirma los tamaños de pantalla de 4,7 pulgadas y 5,5 pulgadas que ya hemos visto en otras filtraciones. Lo que se indica, además, es que este año no se presentaría el iPhone con panel de 4 pulgadas, muy posiblemente por problemas en la cadena de suministro. Ambos teléfonos (iPhone 6S y iPhone 6S Plus) duplicarían la memoria RAM, ya era hora. De este modo, del giga de RAM LPDDR3 de los modelos actuales, se pasaría por fin a los dos gigas de RAM LPDDR4. La diferencia sería notable y, de confirmarse, podremos disfrutar de una velocidad y rendimiento mayor.
Ambos modelos, también estarían alimentados por el chipset A9 de Apple, fabricado en 14 nanómetros. Este procesador es igual al Exynos 7420 que Samsung utiliza en sus nuevos Galaxy S6, lo que hace pensar que Apple habría vuelto a confiar en la surcoreana para que los desarrolle, como se lleva especulando algún tiempo. Otro de los cambios importantes estaría relacionado con el apartado cámara. No sólo lo asegura el informe de KGI Securities, también otros medios. Todos coinciden, en que el próximo iPhone equiparía una cámara principal de 12 megapíxeles. Parece, por tanto, que la californiana se habría decidido de una vez a superar la barrera de los 8 megapíxeles.
En cuanto al diseño, Apple haría uso del aluminio Series 7000, un 60 por ciento más resistente que el usado en los modelos actuales y que ya está presente en el Apple Watch. Se trata de un material mucho más duro y que se araña y deteriora mucho menos. Por su parte, parece que habría un nuevo color. Según el informe, el iPhone 6S también estaría disponible en Rosa Gold, quizá más orientado al público femenino. Además, parece que el dispositivo llegaría en una edición limitada con pantalla de zafiro, que le serviría a la compañía para una toma de contacto con el material de cara al futuro.
Actualmente no es posible la fabricación de todas las unidades con este tipo de pantalla, debido a los problemas que ha tenido la empresa GT Advanced Technologies, principal suministradora. KGI culmina su informe asegurando, que la producción de los nuevos terminales comenzará el próximo mes de agosto, lo que significa que la presentación volvería a estar programada para septiembre.