Después de que NVIDIA demandara a Samsung por infringir sus patentes, la compañía coreana ha presentado una contrademanda, tal y como señala Phonearena. El fabricante de móviles no sólo acusa a la firma de tarjetas gráficas de utilizar seis licencias sin su permiso, si no que además culpa a la empresa de engañar a los usuarios mediante la revelación de cifras de referencia falsas de su NVIDIA Shield Tablet.
«Estamos llevando a cabo las medidas necesarias para defender nuestros derechos de propiedad intelectual y para asegurar nuestro continuo crecimiento en la industria», ha explicado Samsung.
Los coreanos aseguran que la multinacional habría realizado tácticas de marketing engañosas en los anuncios del Tegra K1, chip que utiliza su tablet. Y es que, en la promoción del dispositivo aseguran que su «procesador es el más rápido del mundo«. Sin embargo, Samsung señala que los estudios citados en el anuncio y elaborados por Primate Labs son falsos.
Los afectados no han tardado en responder, y han señalado en su blog oficial que la «benchmark» (la prueba de rendimiento) es fiel a la realidad. Es decir, que es verídica. La compañía asegura que las acusaciones de Samsung sobre el rendimiento de su procesador son falsas y que las pruebas se han realizado con una «configuración de fábrica mediante un software disponible de forma pública».
Samsung también también ha demandado a Velocity Micro, y ha señalado que NVIDIA habría violado seis de las ocho patentes en disputa, mientras que Velocity Micro habría infringido todas. Entre las tecnologías figuran sistemas técnicos como controles de caché y sistemas físicos como métodos de anclaje. Esto podría explicar el menor número de acusaciones sobre NVIDIA, ya que ellos no fabrican semiconductores de forma directa.
Igualmente, en el mismo post NVIDIA señalaba que sus pruebas eran falsas, la empresa lamenta la implicación de la otra compañía. «Suponíamos que nos iban a responder con otra demanda. Era predecible. Sin embargo, sentimos que Samsung haya demandado a Velocity Micro. Esta no es su batalla», afirman en el blog.
La demanda se ha producido después de que el fabricante de tarjetas gráficas acusara a la compañía coreana y a Qualcomm de infringir sus patentes en las GPU. La empresa afirma que ambas empresas infringieron siete de sus licencias que corresponden a tecnologías de iluminación, shaders programables, shaders unificados, procesamiento paralelo vía GPU y procesamiento gráfico.
Y es que esta batalla parece no tener fin. Nvidia ya obtuvo una pequeña victoria sobre Samsung hace unos meses, en la que abrió la puerta para prohibir la venta de determinados productos de la firma en Estados Unidos. Entre los dispositivos que se han visto afectados se encuentran: el Galaxy S4, el Galaxy S5, el Galaxy Note Pro, el Galaxy Note 3, el Galaxy Note 4, el Galaxy Tab 2, el Galaxy Tab S y el Galaxy Note Edge.