Los altavoces Bluetooth normales suelen sacrificar la calidad de sonido por su diseño compacto y transportable, pero hay opciones que reúnen ambas ideas. La firma británica Bowers & Wilkins ha creado su primera caja acústica portátil, empleando la tecnología de sus productos más prestigiosos, pero reduciéndola al máximo para que podamos llevarla a todas partes, y sin cables. La Bowers & Wilkins T7 es una caja muy compacta que ofrece sonido de alta fidelidad gracias a su estructura de colmena Micro Matrix, que también está en productos tan prestigiosos como las cajas de la serie Diamond 800, que se usan en estudios míticos como Abbey Road en Londres. Tiene conexión Bluetooth para que podamos escuchar la música desde el smartphone, la tablet o el ordenador. Además tiene batería de litio para que nos la podamos llevar a cualquier lugar.
Bowers & Wilkins ha creado una especie de versión en miniatura de sus cajas acústicas más avanzadas, empleando la estructura de panal de abeja Micro Matrix. No se trata de un complemento estético (que también) sino de un refuerzo para la estructura que consigue eliminar las vibraciones y reproducir un sonido de alta fidelidad. Además le da más rigidez al conjunto y sirve como un armazón sólido donde se sujetan los altavoces. Tiene un diseño rectangular, con las esquinas ligeramente redondeadas y la parte frontal contrastan las texturas de ambas rejillas. Los controles están en la parte superior, y son de lo más sencillos. Hay un botón para conectar o desconectar el Bluetooth, otro para reproducir o pausar la pista y los controles de volumen. Una vez la conexión esté activada sólo tendremos que explorar desde nuestro móvil, tablet u ordenador para encontrar el altavoz y empezar a escuchar música. Además, su conexión tiene aptX, un sistema que asegura que no hay pérdida de calidad en la transferencia inalámbrica.
En su interior cuenta con dos altavoces de 50 milímetros de diámetro, pensados para obtener la máxima calidad en el espacio interior de la caja, que es bastante reducido. El diafragma es de fibra de vidrio y están montados sobre una pieza de acero para que el movimiento esté lo más controlado, mientras que el aire fluye sin problemas. También tiene dos radiadores de graves de alta potencia que extienden la respuesta en frecuencia y potencian los bajos sin distorsionar. Además cuentan con un convertidor de señal digital a analógica que ofrece una gran precisión, para así aprovechar al máximo la potencia del altavoz sin que pierda calidad. Como decíamos, cuenta con una batería de litio recargable para poder usarlo en cualquier lugar, incluso fuera de casa, sin depender de los molestos cables. Mide 21 centímetros de ancho y 11,4 centímetros de alto, con una profundidad de 5,4 centímetros. Su peso total es de 940 gramos, una cifra bastante ajustada que nos permitirá llevarlo sin que nos moleste. La carcasa está hecha de policarbonato, un tipo de plástico muy resistente.
