Poco a poco, lo que hasta hace casi nada nos parecía el techo de la calidad de imagen, se va quedando atrás. Y es que FullHD, el formato de 1.080 x 1.920 puntos con el que el blu-ray adelantó salvajemente al DVD, ya se ha convertido en un estándar y, por lo tanto, ya hay alternativas de mayor calidad que, a su ritmo, van llegando al mercado. Tal es el caso de Samsung UD590 monitor de 28 pulgadas Ultra HD, que confirma que la ultra alta definición, también denominada 4K, no sólo es una realidad ya en televisores de gama alta, sino también en monitores para ordenador, aunque todavía vayan a tardar algún tiempo en popularizarse (de momento su precio los sitúa fuera del alcance de la mayoría).
El modelo, presentado por Samsung en su European Forum, que se está celebrando estos días en Málaga, ofrece resolución UltraHD (3.840 x 2.160 puntos), es decir, 8.294.400 puntos de imagen, cuatro veces la definición de FullHD (1.920 x 1.080 puntos), que es de 2.073.600 píxeles. Su tiempo de respuesta es particularmente rápido, de sólo un milisegundo, lo que lo hace más que apto no sólo para reproducción de contenido multimedia, sino también para juegos, donde el tiempo de respuesta es un factor crítico para los más jugones, puesto que puede marcar la diferencia entre reaccionar a tiempo, o demasiado tarde. Cuenta con una profundidad de color de 10 bits, lo que multiplica por 64 la gama de colores de un monitor estándar. Esto, sin duda, resultará interesante a diseñadores, que necesitan que la correspondencia entre los colores con los que trabajan y los que se muestran en pantalla sea absoluta. Además. a la hora de reproducir contenidos FullHD, cuenta con la tecnología UHD Upscale, propia de Samsung que, básicamente, lo que hace es escalar la imagen aplicando algunos filtros de corrección, lo que mejora en cierta medida la calidad de la imagen.
Además de la ya clásica función picture in picture (esa que permite ver una señal en toda la pantalla, menos en una de sus esquinas, en las que en un recuadro se muestra otra distinta), y que en este caso ofrece calidad FullHD en la miniatura, también cuenta con el modo Picture by picture, cuya función es permitir conectar dos ordenadores a la misma pantalla y, dividiendo la misma en dos partes, trabajar de manera simultánea con ambos equipos. Otras mejoras de imagen que ofrece son las que se incluyen en el denominado Game Mode, especialmente diseñado para juegos (como su propio nombre indica) y que ofrece la posibilidad de mejorar la luminosidad y el grado de enfoque de las imágenes que muestra en tiempo real. Esto puede resultar particularmente práctico en entornos de alta luminosidad, donde un juego de aspecto oscuro puede ser casi imposible de ver en una pantalla normal. En cuanto a sus conexiones, cuenta con una entrada DisplayPort y dos conectores HDMI, lo que lo hace compatible con la inmensa mayoría de dispositivos de reproducción de vídeo, así como con consolas.