Microsoft presentó sus resultados económicos de su segundo trimestre fiscal (que terminó el 31 de diciembre) con unas cifras que están por encima de lo que habían previsto los analistas, pero que siguen reflejando la debilidad del mercado de los ordenadores y la lenta adopción de Windows 8. Entre los meses de octubre y diciembre, la compañía estadounidense consiguió unos ingresos de unos 17.900 millones de euros y ganó 4.790 millones de euros, una cifra que está ligeramente por encima de los beneficios del año pasado. Gran parte del crecimiento experimentado por la marca se debió al buen funcionamiento que está teniendo su nueva consola Xbox One y a su negocio en el mercado empresarial.
La compañía de software consiguió alcanzar unas ventas de 24.520 millones de dólares (unos 17.900 millones de euros) en el último trimestre, una cifra que está un 12% por encima de los resultados del mismo periodo de 2012. Esta cifra se une a los beneficios de 6.560 millones de dólares (4.790 millones de euros), que suponen un 3% más que en al año anterior. Con estos resultados, la firma ha conseguido capear una campaña navideña que se aventuraba muy complicada por el mal momento del mercado del PC y la mala respuesta que hasta el momento ha tenido Windows 8.
De hecho, las ventas de su división de Windows cayeron un 3% durante este periodo, pero esta caída se ha visto compensada por varias divisiones que han conseguido mejorar sus números. Por ejemplo, la plataforma Office ha sabido mantener su fortaleza en el campo empresarial y es el segmento de la compañía que más dinero aporta. Pero también ha crecido su máquina de búsqueda Bing, que ya se sitúa con un 18% de cuota de mercado en Estados Unidos. La plataforma publicitaria asociada a las búsquedas ha generado durante este periodo un 34% más de ingresos, una buena noticia para la compañía que ha invertido de manera muy fuerte en este segmento en los últimos años. Eso sí, fuera de Estados Unidos y en mercados como España la presencia de Bing es prácticamente testimonial.
Otro de los segmentos que han experimentado un crecimiento notable ha sido la de Surface. La salida al mercado de las tablets Surface 2 RT y Surface 2 Pro ha supuesto el despegue de esta división, después de que Microsoft mejorara algunos aspectos clave de estos dispositivos que habían quedado cojos en la primera versión. Gracias a ello, las ventas se han doblado desde los 400 millones de dólares que se consiguió en el último trimestre de 2012 hasta los 893 millones de dólares (650 millones de euros). Eso sí, la Surface con Windows RT sigue evidenciando la debilidad de esta plataforma con chips ARM que parece abocada al fracaso.
También hay que destacar el buen funcionamiento de la Xbox One. La compañía ya ha enviado 3,9 millones de unidades de esta consola a los vendedores, lo que le ha supuesto una mejora del 13% en relación al mismo periodo del año pasado. Al margen de los resultados económicos, la actualidad de la compañía de Windows sigue girando en torno al sucesor de Steve Ballmer. Casi cada semana surge un nuevo candidato a tomar las riendas de esta empresa, pero de momento la compañía no se ha pronunciado de forma oficial sobre el sustituto.
