TV OLED LG 77EC9800

LG ha diseñado tres TV OLED curvos con tamaños de pantalla de 55, 65 y 77 pulgadas que emplean la tecnologí­a WRGB propia de este fabricante y una resolución 4K (3.840 x 2.160 pí­xeles). El sistema WRGB emplea un pí­xel más que en otros sistemas, que aquí­ son los tradicionales rojo (Red, la R de WRGB), verde  (Green, la G de WRGB) y azul (Blue, la B de WRGB) a los que se une uno blanco (White, la W de WRGB). De este modo la gama tonal y la luminosidad que son posibles en cada punto de imagen aumenta de forma significativa.

El modelo más alto de la gama, el 77EC9800, dispone de un sistema de control de la temperatura del color individualizado para cada pí­xel de la pantalla mediante el sistema LG Color Refiner. El ratio de contraste lo controla con el algoritmo High Dynamic Range (HDR) que le permite alcanzar valores más altos que con modelos anteriores. Asimismo, este televisor cuenta con el sistema Ultra Cinema 3D: la tecnologí­a FPR unida a la resolución UltraHD hace que el efecto 3D percibido por el espectador sea mucho más realista y creí­ble, al tiempo que lo consigue sin los molestos parpadeos de los primitivos sistemas 3D.

Lo que más llama la atención del televisor 77EC9800 es que no sólo tiene una pantalla OLED curva, sino que ésta es flexible y puede adoptar cualquier posición desde estar completamente plana hasta tener la curvatura recomendada por los ingenieros de LG. La curvatura de la pantalla se elige con el mando a distancia y permite así­ adaptarse a los gustos del usuario y a las distancia a la que éste se encuentre situado.

TV OLED LG 77EC9800

Pero, obviamente, gran parte de los contenidos audiovisuales que se mostrarán en televisores tan avanzados no tendrán la máxima calidad que un aparato así­ es capaz de mostrar, por lo que es muy importante que sepa adaptar y mejorar, en la medida de lo posible, fuentes de señal de peor calidad. Esto lo consigue con el motor gráfico Tru-Ultra HD Engine Pro, gracias al que se escalan los contenidos en definición estándar, HD o Full HD hasta una resolución más alta que aproveche las bondades de su panel 4K. Dispone también del sistema MEMC (Motion Estimation Compensation) para que los movimientos en pantalla se perciban con mayor suavidad, claridad y realismo.

Todos estos televisores OLED son compatibles con una amplia gama de formatos de ví­deo: Ultra HD, H.264 o HEVC H.265, todos ellos a 30p y a 60p. Y estos contenidos pueden proceder de cualquiera de las tomas disponibles: HDMI, USB o LAN. Esto se complementa con el sistema Smart TV para acceder a contenidos audiovisuales a la carta mediante una conexión a Internet.

El modelo de 55 pulgadas ya se pudo ver en el CES de 2013 pero en esta ocasión se ve acompañado de sus «hermanos mayores» de 65 y 77 pulgadas, lo que muestra que LG ha conseguido dominar el arte de fabricar paneles OLED de gran tamaño, algo que hasta ahora habí­a demostrado ser un escollo bastante importante para popularizar esta tecnologí­a.

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