La Agencia de Seguridad Nacional estadounidense sigue acumulando escándalos por espionaje a sus ciudadanos y no parece que vayan a cesar las malas noticias para ellos. La avalancha iniciada por Edward Snowden este verano se va haciendo cada vez más grande y no parece que la NSA conozca límites a la hora de desarrollar programas de vigilancia ciertamente sospechosos. La agencia cuenta con los recursos necesarios para saltarse casi cualquier sistema de protección informático, o al menos eso parece a juzgar por todas las acusaciones vertidas contra ellos. La última desvela que los iPhone de Apple han sido una herramienta activa en el desarrollo de esta vigilancia desde hace bastantes años. El periódico alemán Der Spiegel publica nuevos datos que indican que la NSA ha utilizado los smartphones de Apple para llevar a cabo sus programas, pero además todo indica que habrían recibido ayuda de la propia compañía.
Si ayer salió a la luz la lista de la NSA con los productos potencialmente «espiables» y sus correspondientes instrucciones para acceder a las llamadas ‘puertas traseras’, hoy se suma un nuevo producto: el iPhone de Apple. El documento filtrado y publicado por Der Spiegel contiene información sobre un programa de spyware llamado DROPOUTJEEP que llevaría activo desde nada menos que 2008, aunque actualmente no está claro su estado y podría haber sido desactivado. Este programa permitiría a la NSA acceder al dispositivo mediante SMS o conexión móvil y deja al descubierto prácticamente todos los datos que contiene. El documento se refiere a leer mensajes de texto, escuchar mensajes de voz del buzón, recopilación de la lista de contactos, descarga o subida de datos de cualquier tipo, activar el módulo de la cámara o tomar control del micrófono -es decir, no sólo podrían robar datos de los usuarios, sino que podrían espiar a tiempo real activando el micrófono.
Lo más siniestro de todo es que para activar el sistema DROPOUTJEEP sería necesario acceso físico al dispositivo. En teoría la NSA interceptaba los iPhone comprados online, aunque podrían estar trabajando en una forma de instalarlo de forma remota. Jacob Applebaum, experto de seguridad, asegura que la NSA ha conseguido una tasa de éxito del 100% cuando se trata de implantar spyware en un iPhone y apunta a la posibilidad de que la propia Apple haya ofrecido su ayuda durante todo el proceso. Realmente suena descabellado que la NSA haya conseguido realizar todo este proceso sin fallar ni una sola vez y no hayan tenido ayuda de ningún tipo. Sin embargo esta acusación no puede ser probada mediante el documento filtrado.
Instalar programas espía en los iPhone se suma a la lista de escándalos de la Agencia de Seguridad Nacional. Edward Snowden les ha aguado la fiesta y además se mofa en sus últimas declaraciones, donde asegura que lo ha hecho por mejorar la NSA: «No estoy tratando de acabar con la NSA, sino que estoy trabajando para mejorarla… Todavía trabajo para la NSA actualmente. Ellos son los únicos que no se dan cuenta».