Desde la aparición de las tablets, como concepto revolucionario, los usuarios hemos estado esperando para saber cuál sería el próximo gadget en llegar a nuestras vidas. Y, aunque hace al menos un año que ya se habla insistentemente de ellos, no ha sido hasta hace muy poco que los relojes inteligentes han llegado a nuestras vidas… o al menos amenazan con hacerlo. En pocos meses, hemos pasado de algunos anuncios y otros tantos rumores, a ver la llegada al mercado, finalmente, de varios de estos dispositivos, y hemos empezado a conocer sus posibilidades y sus limitaciones. Y algo que ha quedado bastante claro casi desde el principio, es que uno de sus principales usos es el relacionado con las actividades deportivas. Así que no es de extrañar que, tras los fabricantes de electrónica de consumo, otros del ámbito deportivo se hayan sumado a la producción de este tipo de dispositivos. Adidas ha anunciado su propio smartwatch, que ha sido especialmente diseñado para amantes del running, una de las disciplinas deportivas más populares en los últimos años.
El smartwaths de Adidas para runners, ha sido anunciado en la conferencia GigaOM’s Mobilize 2013 en San Francisco por Paul Gauido, vicepresidente de Adidas Interactive. Se trata de un dispositivo diseñado especialmente para practicar desporte, y especialmente para running (correr), por lo que según el directivo de Adidas, no han contemplado funciones que un deportista no necesita para sus entrenamientos. Así, en una decisión que sí que resulta un tanto sorprendente, el reloj no se conecta a smartphones, por lo que no se emplea en combinación ni con el software de Adidas ni con soluciones de terceros. En su lugar, el dispositivo cuenta con los elementos necesarios para determinar tu posición, velocidad y ritmo cardiaco, un dato fundamental para ajustar las propiedades de cada entrenamiento.
También permite almacenar una selección de música para los entrenamientos, que se puede escuchar exclusivamente a través de auriculares bluetooth (ya empiezan a aparecer auriculares sin cables de tamaño y diseño adecuados para la práctica del deporte). Y, también a través de la conexión bluetooth y los auriculares, estará disponible un «personal trainer virtual», que tendrá permanentemente controlada tu frecuencia cardiaca y te irá dando recomendaciones y consejos, y también se preocupará de motivarte (algo que se agradece mucho durante los entrenamientos). La disponibilidad del dispositivo es inminente, estará a la venta a partir del uno de noviembre (el viernes de la semana que viene) y su precio será de 399 dólares (todavía no se sabe cuál será su precio en Europa).
Su precio, unido a la falta de conectividad con smartphones son el principal punto debil del smartphone de Adidas para runners. Y es que, por ese precio, es posible encontrar otros dispositivos que sí que disponen de dicha conectividad y, por ello, cuentan con más funciones. Por otra parte, es el único reloj inteligente que incorpora de serio un pulsómetro. Y, aunque un tanto sorprendente, el planteamiento expuesto por Paul Gauido sí que tiene cierta lógica, especialmente si su interfaz está bien resuelta. Y es que hay pocas cosas que den más pereza, justo cuando te dispones a iniciar una sesión de running, que tener que esperar un par de minutos abriendo la app, configurando el tipo de actividad, activando o desactivando notificaciones… y todo eso cuando ya deberías (y quieres) estar corriendo.
Buen resumen en el último párrafo. Estoy de acuerdo en que el precio es excesivo. Para lo que ofrece existen otros relojes inteligentes como el Kreyos Watch que cuestan menos de la mitad.
Saludos!
Exacto, el problema es el precio, aunque al tratarse de un producto de Adidas, marca por la que la gente está dispuesta a pagar un sobreprecio, quizá funcione. En cualquier caso, sus grandes bazas son la integración del pulsómetro de serie (fundamental si practicas deporte) y, esperemos, una interfaz optimizada al máximo. Te confieso, en cualquier caso, que como reciente aficionado al running que soy, sí que tengo cierta curiosidad por probarlo.