El uso de aparatos electrónicos en los aviones está sujeto a unas regulaciones bastante estrictas que, por ejemplo, impiden el establecimiento de llamadas telefónicas desde que se cierran las puertas del avión hasta que se abren cuando se ha llegado a destino. Durante el vuelo sí se pueden utilizar, aunque con ciertas limitaciones, como no emplear las conexiones de datos y usar los dispositivos, como tablets y smartphones, en el denominado modo avión. Esto último es llevadero, puesto que aunque con límites, permite usarlos para leer libros electrónicos, escuchar música, jugar o ver vídeos o películas que lleves almacenadas en su memoria.
Pero durante el despegue y aterrizaje hay que tenerlos apagados, algo que es motivo de quejas entre los pasajeros. Sobre todo, porque no existe la certeza de que los dispositivos electrónicos, siempre y cuando tengan activado el modo avión, interfieran en las maniobras necesarias para el aterrizaje o el despegue. Hay quien se hace el loco y sigue con sus dispositivos encendidos en modo avión, aunque no los esté utilizando. La escena de una azafata ordenando a algún pasajero «rebelde» que apague su teléfono móvil ya con el avión en marcha es también algo muy frecuente. Todo con tal de no apagarlos.
Por suerte, parece que el aburrimiento durante despegue y aterrizaje puede tener los días contados. Un indicio de ello, aunque todavía no es oficial, es que la FAA (Federal Aviation Administration), un organismo estadounidense que, entre otras muchas cosas dicta las normas de seguridad que deben cumplirse durante un vuelo, puede que relaje muy pronto las que rigen el uso de los dispositivos electrónicos a bordo de un avión. En efecto, según ha recogido el New York Times, los miembros del consejo que asesora a dicho organismo se van a reunir esta misma semana con el objetivo de sugerir el levantamiento de algunas de estas prohibiciones, lo que haría los viajes más agradables a los viajeros que no puedan despegarse de sus aparatos.
Entre las actividades que podrían autorizarse durante el despegue y el aterrizaje en dicha reunión están la lectura de libros y revistas en formato electrónico y la reproducción de vídeos y música en formato digital. Lo que sí seguiría prohibido es la realización de tareas que sí requieran una conexión a Internet, como el envío de correo electrónico o la navegación web, así como el establecimiento de llamadas o el envío y recepción de mensajes de texto.
Cuando el panel de expertos haya alcanzado un acuerdo, se reunirá antes de final de mes con la FAA, que tomará las decisiones necesarias con respecto a estas y otras directrices. Sus integrantes quieren presentar a este organismo unas normas unificadas y que se aplicarían a todas las aerolíneas y a cualquier tipo de avión. Para ello, en vez de probar, de uno en uno, si efectivamente los dispositivos interfieren en las maniobras de despegue y aterrizaje, se pedirá a las aerolíneas que certifiquen que sus aviones pueden tolerar las interferencias. Y se ha demostrado que es posible, ya que algunas ya ofrecen servicios de conexión WiFi a bordo. Si, efectivamente, se decide relajar las normas de uso de aparatos electrónicos durante el despegue y el aterrizaje de los aviones, todavía habrá que tener un poco de paciencia, puesto que la nueva normativa no entrará en vigor hasta el año que viene, ya que el cambio de las normas de seguridad de la aviación es un proceso bastante lento.
Jajajaja yo nunca apago el movil, ni lo pongo en modo avión. Y que ha pasado ? N A D A
Eso es una chorrada, ningún dispositivo de consumo puede interferir con los controles de un avión y esta más que demostrado
Aunque ustedes no lo crean. Muchos pilotos ya se apoyan en estos dispositivos para la utilización de cartas de navegación y reportes del clima en la ruta de una manera inmediata. Entonces parece mentira que ellos los utilicen y a los pasajeros se les prohíbe su utilización