Hace varias semanas anunciábamos la llegada del primer smartphone de la marca Wiko a nuestro país, el Wiko Cink Five. Agosto fue el mes elegido por esta compañía para dar el salto a España desde Francia, el primer país europeo donde se comercializó hace ya nueve meses. Móviles con componentes avanzados y las últimas versiones de Android con precios próximos a las gamas media y baja son el secreto de su éxito. Este fabricante europeo demuestra que se pueden hacer móviles completos y equilibrados sin cobrar más de 500 euros por ellos y los consumidores han respondido positivamente. Según datos de la consultora Gfk, Wiko ya se ha consolidado como el segundo fabricante de smartphones libres en Francia, y como decíamos en tan sólo nueve meses.
Con los operadores abandonando la fórmula de subvencionar smartphones, cada vez son más los clientes que apuestan por adquirir un smartphone libre para no depender de ninguna compañía. Wiko ofrece opciones muy competitivas con precios realmente bajos, esta es la estrategia de la compañía. En sus seis primeros meses en Francia (hasta junio) han conseguido hacerse con un 17,7% de la cuota de mercado de smartphones libres, que se dice pronto. Por otro lado contando solamente el mes de junio, llegaron al 18,5%, indicando que el continúan creciendo a muy buen ritmo. En el país vecino cuentan con un catálogo más amplio de dispositivos, que oscilan entre los 90 euros y los 290 euros. La idea es repetir este éxito en España y también Portugal, donde acaban de empezar su andadura.
Wiko ya ha lanzado dos smartphones en nuestro país, el primero fue el ya nombrado Wiko Cink Five, un smartphone que juega en la liga de las pantallas grandes y cuenta con un perfil técnico que no defrauda en absoluto. Su pieza más destacada es el panel IPS de cinco pulgadas con resolución HD, un componente que en otras marcas ya en síntoma de precios altos. También cuenta con un procesador de cuatro núcleos, un Gb de memoria RAM y cámara de ocho megapíxeles con sensor BSI y grabación de vídeos FullHD 1080p. Por si fuera poco sale de serie con Android 4.1 Jelly Bean y cuesta 200 euros.
El último modelo en aterrizar en España ha sido el Wiko Cink Slim, un modelo con prestaciones algo más modestas pero que sigue la misma línea de calidad-precio. En este caso encontramos una pantalla IPS de cuatro pulgadas con resolución WVGA, procesador de doble núcleo, 512 Mb de memoria RAM y cámara de ocho megapíxeles que graba vídeos HD720p. De nuevo sale de fábrica con Android 4.1 Jelly Bean y el precio se rebaja a 130 euros.
Wiko es unaa firma europea partner de Tinno, el cuatro fabricante de smartphones de China y que sólo en 2012 vendió más de 25 millones de móviles en todo el mundo. La fórmula de ofrecer terminales muy completos a precios tan asequibles les está funcionando a la perfección. El crecimiento de la compañía en Francia es muy satisfactorio y se espera que se repita la misma situación en España en los próximos meses.