Los teléfonos móviles graban hoy vídeos en Full HD, y casi todas las cámaras réflex de hoy en día pueden hacerlo también con bastante calidad. Sin embargo, cuando nos planteamos ir un paso más allá y hacer vídeo con cierta calidad, hay que empezar a pensar en videocámaras de verdad. Canon sigue siendo una de las marcas con más prestigio en este mundo, y no le faltan razones. Las nuevas Canon XA25, XA20 y LEGRIA HF G30 juegan en otra liga.
Las tres videocámaras comparten un mismo objetivo, que destaca por tener un buen angular y un zoom poderoso de 20 aumentos. En fotografía tradicional de 35 mm, llamaríamos a este objetivo un 26.8 – 536 milímetros. Es un objetivo versátil, que permite grabar en circunstancias muy diferentes. El conjunto incluye también un estabilizador de imagen de tres modos.
El diseño de la óptica permite trabajar con una profundidad de campo muy pequeña. Esto se debe en parte a la utilización de una tecnología de diafragma magnético, propio de la marca japonesa. Con ella, se pueden crear efectos interesantes como el desenfoque del fondo en determinados planos.
Los dos modelos más avanzados, XA25 y XA20, cuentan con un sensor CMOS HD Pro de tipo 1/2,84” y 2,91 megapíxeles. Es un sensor grande, lo que permite reducir el ruido de imagen en condiciones de iluminación deficientes. El modelo LEGRIA HF G30 lleva un sensor CMOS HD Pro, DIGIC DV 4.
En los modelos avanzados encontramos otra novedad interesante: la conexión WiFi. Esto permite visualizar lo grabado en equipos como ordenadores o televisiones conectadas sin necesidad de cables. También es compatible con dispositivos IOS, por lo que se podrían subir los vídeos a redes sociales, Youtube o sistemas de almacenamiento en la nube, si se cuenta con uno de estos dispositivos.
La conexión WiFi está marcando el mercado de las cámaras y videocámaras en los últimos tiempos. Sin embargo, hasta ahora está siendo un complemento más propio de las cámaras de bajo coste, mientras que en equipos profesionales como estos sigue siendo una excepción.
En los tres modelos encontramos una pantalla táctil OLED de 3,5 pulgadas. A través de esta se llevan a cabo una buena parte de los controles de la cámara. No obstante, se puede llevar a cabo la grabación a través del visor electrónico tradicional.
Todos los modelos pueden elegir entre distintos formatos de grabación como AVCHD o MP4. Esto permite seleccionar las características más adecuadas al tipo de vídeo que estemos grabando o las opciones de edición que vaya a necesitar después.
En el asa de los modelos superiores encontramos multitud de controles. Destacan las dos entradas XLR para micrófonos externos. Gracias a ellas podemos lograr unos efectos de sonido más profesionales. El modelo XA25 incluye también una salida de vídeo sin compresión HD-SDI.
La Canon XA25 costará unos 2.800 euros, mientras que su hermana menor, la XA20 alcanzará unos 2.200. El modelo para aficionados Legria HF G30 se queda en unos 1.700, aunque los precios no son por el momento oficiales. La marca japonesa tampoco ha puesto una fecha tope para que estas videocámaras lleguen al mercado.
