lg pm9700

Cada vez se pone más difí­cil lo de comprarse un televisor. Hasta el momento habí­a que elegir entre tres tecnologí­as: plasma, LCD con retroiluminación LED y el recién llegado OLED. Ahora hay otra alternativa, los nuevos televisores PLED, como los que acaba de presentar LG. Y el nombre no significa que sea un hí­brido del plasma y del LED, aunque la confusión viene bien a efectos publicitarios. En realidad son las siglas de Pixel Light-Emitting Display, esto es, un panel de imagen que emite luz para cada pí­xel. Algo que ya funciona en el plasma y en la tecnologí­a OLED. Como estos últimos, los paneles PLED, permiten iluminar de forma independiente cada uno de los pí­xeles. Esto se traduce en pantallas solo de tamaño grande: De momento las teles PLED van a estar disponibles en el mes de abril en la familia LG PM9700, con diagonales de 50 y de 60 pulgadas. ¿Lo mejor? Buena luminosidad en unas teles bastante delgadas ¿lo peor? Sólo estará disponible en gran formato, a precios elevados y con un sonido de baja calidad.

Son pantallas con marcos muy delgados acabados en metal negro bruñido. Pesan poco, porque esos paneles de imagen son tan ligeros como los LED de última generación. La nueva tecnologí­a permite hacer pantallas en alta definición Full HD 1080p con una buena capacidad de reproducción de colores, y una velocidad refresco bastante rápida. En cuanto al contraste, en algunos casos pueden incluso mejorar el de las pantallas LED.

Esta familia de pantallas tiene 6,2 millones de puntos de luz independientes. Esto aporta contraste, una curiosa nitidez en las sombras y bordes definidos. A esto hay que añadir una velocidad refresco de 600 Hz, que se traduce en imágenes en movimiento bastante naturales. Cada pí­xel posee su propia iluminación, con lo que no hay retroiluminación trasera, y esto elimina los halos y las imágenes fantasma en los movimientos más rápidos.

lg pm9700

La tecnologí­a PLED precisa de una enorme capacidad de cálculo. De ahí­ la inclusión del motor de imagen Triple XD Engine FHD 3D. Como su propio nombre indica, facilita la reproducción de imágenes en dos y en tres dimensiones, y la conversión de imágenes 2D a 3D para aquellos que no quieran invertir en nuevos contenidos. La pantalla además trabaja con gafas polarizadas (pasivas). PLED consume menos que el plasma, lo que también cuenta a la hora de tomar la decisión de compra. El sonido es malo como era de esperar en unas pantallas tan delgadas; llega desde dos altavoces de 10 W y, al ser tan poco profundos, ofrecen un sonido sin graves y apenas sin medios.

La conectividad, como es habitual en las últimas teles de alta gama, es completa. Tienen dos entradas HDMI en la trasera y dos en un lateral de la versión 1.4 (con 3D y canal de audio de retorno), un puerto Ethernet, y dos puertos USB 2.0 desde donde reproduce ficheros MKV, DivX HD, MP3 o JPEG. Son televisores conectados, con un procesador rápido y capaz, y que se manejan desde una interfaz basada en iconos. El usuario puede instalar nuevas aplicaciones. Tiene un navegador web compatible con Flash 10.0, que puede abrir hasta cuatro páginas a la vez. De hecho puede memorizar un historial de 30 páginas web. Otra novedad en estas teles es su mando a distancia. Lo llaman Magic Control y actúa como un ratón inalámbrico. Los precios de estas nuevas teles son altos como era de esperar: 1.700 euros para el modelo de 50 pulgadas, y 2.200 euros para el de 60 pulgadas.

Recibe nuestras noticias

De lunes a viernes mandamos un newsletter con los titulares del día a +4.000 suscriptores

I will never give away, trade or sell your email address. You can unsubscribe at any time.