Cuando salió al mercado, hace ya cinco años, el reproductor musical Zune de Microsoft levantó bastante polvareda. En realidad no se debía tanto o a sus virtudes y capacidades técnicas como a la osadía de los de Redmond de competir con el iPod en su mismo terreno. Salvo esos primeros fuegos artificiales, las ventas no fueron tan bien como esperaban los de Microsoft, y el reproductor fue poco a poco marchitándose, mientras iban apareciendo nuevos productos en el mercado.
A principios de este año corrieron rumores que afirmaban que Microsoft estaba a punto de abandonar la producción y comercialización de su línea de reproductores musicales, pero los de la casa se apresuraron a negarlo. Hicieron una de esas declaraciones institucionales del estilo de «ni mucho menos, vamos a seguir apoyando con todas nuestras fuerzas nuestra línea de reproductores». Ahí fue donde todo el mundo supo que el Zune estaba herido de muerte. Sólo faltaba por saber la fecha del certificado de defunción.
Microsoft prefiere por el momento Windows Phone como plataforma desde la que reproducir música y videos en movilidad. La empresa ha hecho un comunicado oficial en el que declara que aunque dejen de vender el dispositivo, los usuarios podrán seguir utilizando los servicios en la red de Zune, y que además mantendrá el soporte al cliente y las condiciones de garantía. Traducido al román paladino, quien haya caído en la tentación de comprar uno de estos reproductores en los últimos meses, debe saber que la compañía va a hacer honor a las garantías durante los dos años que exige la ley, y poquito más.
El mercado ha cambiado radicalmente en estos últimos cinco años. El Zune se ha dado la torta, pero a los iPod no le va mucho mejor. Los de Apple van a podar su catálogo eliminando algunos de los productos de la gama. La competencia está ahora en los teléfonos móviles, y de nuevo los de la manzana han logrado hacerse hueco en el mercado aunque hay otros fabricantes, como Samsung, que le disputan ferozmente titulares y estanterías.
Cuando Microsoft tiene real competencia, o sea cuando no puede abusar de sus monopolios, queda en evidencia que sus productos son pura basura. Por ejemplo windows Vista, yo sigo en XP y espero que windows 15 sea bueno para cambiarme. En cual numero van ?.