Vodafone, sabiendo que muchos usuarios no están dispuestos a hipotecar sus bolsillos por tener un móvil, dispone de una línea de terminales de marca blanca pensados para un público que busca funcionalidad en lugar grandes prestaciones. El Vodafone 840 se enclava en esta categoría, mostrándose como un terminal táctil de prestaciones más o menos básicas. Es posible adquirirlo desde cero euros para clientes que se pasen a contrato o soliciten la portabilidad desde otro operador. Para clientes de la compañía, es posible obtenerlo por 50 euros previo intercambio por 750 puntos.
Los usuarios que opten por este Vodafone 840 tendrá un móvil con pantalla de 2,7 pulgadas, que reproduce música y vídeo, y es capaz de capturar fotografías con su cámara de dos megapíxeles o grabar secuencias (con una calidad que no ha sido desvelada). Puede conectarse a redes 3G mediante UMTS y registra una autonomía de 400 horas en espera y cuatro horas y media durante conversación o navegación.
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