Aunque mueve más de 100.000 millones de euros al año, el comercio electrónico en Europa todavía no es viable. Lo demuestra un estudio realizado por la Comisión Europea, en el que se hace evidente que no es posible comprar productos de consumo básico en las tiendas online de nuestra Europa. El principal motivo: los obstáculos burocráticos.
Los peores países para comprar a través de Internet son Bélgica, Letonia, Rumanía y Bulgaria, mientras que los mejores son España, Austria y Dinamarca. En los experimentos se seleccionaron más de 100 productos de uso habitual como son cámaras, discos, ropa o libros y se intentó comprarlos en los 27 países que conforman la Unión Europea. El resultado tras 11.000 intentos fue que el 60% de transacciones termina en fracaso.
En muchas ocasiones el problema es la tarjeta de crédito, que no es aceptada por la tienda en cuestión. Otras incidencias tienen que ver con la empresa, cuyas políticas no permiten envíos fuera del país. Aunque España ya no es tan reticente a comprar a través de Internet, la comisaria de Consumo Meglena Kuneva ha anunciado que se tomarán medidas para que el ciudadano europeo pueda comprar con efectividad y seguridad a través de Internet. Cuando, ya es otro tema.
Fotos de: Tal Bright, JaciVico y Fosforix.
Tendríamos que saber muy bien a que se deben esas transacciones que terminan en error o en fracaso; personalmente creo que las paginas de venta online están bien estructuradas, pero el cliente potencial no ha recibido ningún tipo de información sobre como se realiza una transacción online.