Ya lo echábamos de menos. Si otrora Nokia dedicó temporadas prolongadas a desarrollar y lanzar teléfonos de una exclusividad que dejaban a Bang & Olufsen a la altura del betún, parece que la firma finlandesa se vuelve a poner las pilas y prepara una nueva embestida de terminales de aspecto prohibitivo. El primero de esta posible serie es el Nokia Erdos 8800, un teléfono de apariencia glacial y prestaciones que quizás pecan por defecto a la hora de haber sido generosos suministrando características, según las pocas informaciones que se conocen por ahora.
Sorprende la pinta de este Nokia Erdos 8800, y el secreto no está en la masa, sino en la carcasa: una única pieza de acero inoxidable protege la arquitectura de este teléfono, ofreciendo un aspecto de gota metal líquido más propio del T-1000 de Terminator 2 que de un terminal móvil. Esta sensación queda potenciada por la pantalla de 2,4 pulgadas que, en estado de reposo, se convierte en un espejo que se mimetiza con el resto de la carcasa. Una pasada, vamos. Y más si consideramos la nitidez que puede ofrecer ésta sabiendo que sus 320 x 240 píxeles están optimizados por una lámina OLED.
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Tecnológicamente, el Nokia Erdos 8800 es un quiero y no puedo. Cierto es que ofrece posibilidades muy interesantes para el público objetivo del terminal (un cliente que busca exclusividad y distinción, pero que tampoco ve muy clara la diferencia entre GSM, GPS, UMTS o GPRS), aunque adolece de una falta de prestaciones que lo habrían situado en paralelo a los últimos modelos del mercado. Por ejemplo, se aplaude la incorporación de una cámara de cinco megapíxeles con autofocus y lente Carl Zeiss, así como la dotación de una memoria interna de ocho gigas no ampliables.
También resulta interesante el apartado de conectividad, que permite 3G, Wi-Fi y A-GPS. Pero queda una enorme duda en el ambiente. ¿Tenemos en el Nokia Erdos 8800 un teléfono de pantalla táctil? Lamentablemente, no. Y puede que ahí resida la principal tara estética y funcional de este móvil, ya que a estas alturas de la historia, puede parecer imprescindible asociar la imagen de exclusividad con la susodicha pantalla.
Por el momento, queda el anuncio por parte del fabricante finlandés para saber más del Nokia Erdos 8800. Para entonces, igual nos llevamos algún susto si además revelan el precio que puede tener esta joya del diseño.
Vía: Actualidad Gadget y Engadget
El teléfono pinta muy bien, la verdad que mucho mejor que el arte o el carbón, que en mi opinión les faltaba algo…
En lo referente a la exclusividad que tu dices, a dia de hoy todas las marcas de móviles tienen terminales táctiles (bastante cutres), dejando de lado el iphone y algún otro. Todo el mundo se ha lanzado a por lo táctil, y por eso mismo ha dejado de ser exclusivo el tener un teléfono de esas características.
La linea 8800 siempre será exclusiva porque lo que pagas son los materiales y el diseño, no las prestaciones, aunque el Erdos parece que apunta un poco más alto.