Cuero, madera lacada en negro, cristal y 242 piezas de relojería de alta precisión son los ingredientes que componen este reloj de la prestigiosa firma Jaeger-Lecoultre realizado para la también carísima marca Alfred Dunhill en una edición especial de sólo 22 piezas en todo el mundo. Inspirado en el estilo Art-Decó de los años 30, esta pieza para coleccionistas con mucha, mucha pasta cuesta la friolera de 70.600 dólares (50.530 euros). Más interesante aún es el sistema de cuerda que utiliza, que hace que pueda funcionar de manera prácticamente indefinida.
El de Jaeger-Lecoultre edición Alfred Dunhill es un reloj Atmos. Este nombre corresponde a una marca registrada por el fabricante suizo de relojes que es uno de los pocos que fabrican este tipo de dispositivos pero la tecnología para fabricarlos ya se descubrió en el siglo XVII. Los relojes atmosféricos se alimentan de los cambios de temperatura y presión atmosférica de su entorno. Tan sólo una variación de un grado en un entorno entre los 15 y 30 grados permite a estos relojes darse cuerda para dos días. En la práctica, los relojes atmosféricos pueden funcionar eternamente (o hasta que sus componentes se degraden) sin intervención humana.
Esto es posible gracias a una serie de cápsulas herméticas que contienen una mezcla de gas y cloruro de etilo en estado líquido. La mezcla se expande y comprime con el más leve cambio de temperatura provocando la compresión de un muelle y dando cuerda al conjunto. Además, este tipo de relojes utilizan un péndulo de torsión que sólo oscila dos veces por minuto, 60 veces menos que un péndulo convencional y con un consumo de energía 250 veces menor. Una obra de arte, en definitiva, de las que se hacen muy pocas en el mundo y una tecnología que no se entiende cómo no está extendida a otros ámbitos.
Vía: Bornrich
ssss como dicen… hay que tener mucha pasta :/
pero buenosi es algo que durara toda la vida sinceramente vale la pena xD
tengo un dunhill pero hecho por mattew norman con placas de granito verde alguien sabe alguna historia de este reloj gracias