Samsung C6625 ”“ A fondo

Un smartphone o teléfono inteligente para todos los públicos. De esta forma reivindica Samsung su última novedad en móviles, el Samsung C6625. Está dirigido a quienes buscan un terminal algo más completo de lo habitual, pero que al mismo tiempo tampoco requieren las prestaciones más avanzadas de los modelos profesionales. Porque, a excepción de algún que otro detalle, esencialmente es un móvil convencional con ciertos retoques aquí­ y allá para darle más funcionalidad.

Y uno de esos retoques es su teclado QWERTY completo, probablemente su seña de identidad más representativa. Nos permite escribir con mayor soltura, y es un elemento que inmediatamente asociamos a los teléfonos avanzados. Aunque insistimos en que este Samsung C6625 busca seducir al consumidor medio. Por eso cuenta con unas dimensiones ligeras y compactas: 109 gramos de peso y medidas de 113,3 x 63 x 11,9 milí­metros. Y su diseño en varios colores también lo hace más vistoso, si bien existe una versión negro que también le da ciertos aires de terminal “serio”.

Su pantalla de 2,6 pulgadas es ligeramente mayor que las que solemos encontrar en móviles orientados al segmento de entrada, pero también más pequeña que las de otros smartphones (sobre todo desde la eclosión de las interfaces táctiles). Es más ancha que alta, ajustándose a las proporciones del teléfono derivadas de su amplio teclado. Pero su definición es más bien discreta, con una resolución QVGA de sólo 320 x 240 pí­xeles (capaz de representar 65 mil colores).

Pero lo que verdaderamente define al Samsung C6625 es el uso de Windows Mobile 6.1 como sistema operativo. La versión móvil de las ventanitas de Microsoft aporta versatilidad con sus diferentes aplicaciones. De cara a Internet tenemos Internet Explorer para visitar páginas web, MSN Messenger para chatear a través de mensajerí­a instantánea y Outlook para el correo electrónico. También lleva instalada una versión reducida de los programas del paquete Office (Word, Excel o PowerPoint), así­ como Windows Media para música y ví­deos. El inconveniente es que este sistema peca de ser poco intuitivo y a veces inestable.

Y otro detalle que no termina de convencernos es la carencia de Wi-Fi. Sobre todo si posee tantas funciones orientadas a la red y, además, un teclado completo que facilita la navegación. Sí­ que posee HSDPA para conectarse a Internet móvil de alta velocidad, pero de rendimiento limitado. Mientras que la máxima tasa de transferencia con esta tecnologí­a es de 7,2 megabits por segundo, con este móvil sólo alcanzaremos los 3,6 megabits por segundo.

Dispone de Bluetooth 2.0 que además es compatible con el perfil A2DP, por lo que es posible usarlo con accesorios inalámbricos (como un kit de manos libres o unos altavoces sin cables). Aparte, lleva integrado un navegador GPS (A-GPS), de modo que puede servirnos de callejero y guí­a de rutas. Es otra de esas caracterí­sticas más propias de teléfonos de gama alta, y que suelen ser muy bien recibidas por los usuarios.

No tiene, en cambio, una cámara de fotos muy potente. Su sensor de dos megapí­xeles nos permite tomar unas instantáneas decentes, pero lejos de la calidad que últimamente vienen ofreciendo los móviles en este aspecto (muchos ya alcanzan resoluciones de cinco y ocho megapí­xeles). También es capaz de grabar ví­deos, pero sólo a una resolución de 320 x 240 pí­xeles. Al menos, eso sí­, lleva una cámara secundaria para videoconferencias. Lástima de nuevo que no disponga de conectividad Wi-Fi.

Como ya hemos indicado, puede reproducir archivos multimedia a través del programa Windows Media. Esto hace que podamos escuchar canciones en formatos digitales como WMA, MP3 o AAC (con sus distintas variantes). O ví­deos que hayan sido codificados en MPEG-4 o WMV. Puesto que sólo dispone de 100 megabytes de capacidad interna, tarde o temprano tendremos que expandir su memoria a través de su ranura para tarjetas microSD. Aun así­, el máximo almacenamiento posible es de ocho gigabytes, por lo que no está de más que al mismo tiempo incorpore sintonizador de radio FM.

Y por último nos queda su baterí­a de 1.300 mAh, que en principio parece suficiente para hacerse cargo de las exigencias de este Samsung C6625. Con esa capacidad serí­a capaz de aguantar siete horas de conversación y hasta 300 horas en espera. Cifras sujetas no obstante al uso que hagamos del móvil, ya que si utilizamos con frecuencia herramientas como el navegador GPS o la conexión a Internet su autonomí­a se verá reducida.

Se sabe que llegará a finales del próximo mes de mayo, pero de momento no se ha revelado cuál será su coste en el mercado español. Sí­ se conoce que será Vodafone quien lo suministre y distribuya. Curiosamente ha sido Movistar quien se ha adjudicado la exclusividad del Samsung C6600, un terminal muy parecido a este Samsung C6625 y con el que ha sido presentado conjuntamente. La guerra de operadoras no descansa.

Ficha técnica