Si vives en una zona donde nunca nieva y tu ilusión sería pasar una blanca Navidad, no te deprimas: en la tienda Brando Workshop, especializada en la venta on-line de gadgets variopintos, encontrarás DIY iSnow, unos minúsculos cubos capaces de fabricar nieve al instante.
La ventaja frente al congelador (incluso aunque sea una nevera del propio Einstein) es que no tienes que esperar mucho tiempo para obtener el ansiado elemento. Basta tan sólo con vertir un vaso de agua para que en el breve transcurso de unos minutos logremos cristalizarla en polvo de nieve.
Se comercializa a través de la división de juguetes de Brando Workshop. La idea es que tenga un uso decorativo o incluso como divertimento (seguro que su sencillez engancha tanto como la del cubo Rubik). Y en el caso de tener niños, hay que tener en cuenta que no es apto para menores de seis años. Por otra parte, aunque no contiene ningún componente tóxico, no recomiendan llevárselo a la boca. Así que mucho cuidado con las guerras de bolas de nieve.
Un set de cinco cubos cuesta cuatro dólares (tres euros al cambio). Esto sin contar con los gastos de envío. Aunque si lo que quieres es pasar unas blancas Navidades, nos tememos que con cinco cubos no tienes ni para empezar.