No es la primera vez que les pasa. Esta vez el Gobierno británico ha perdido un dispositivo que guardaba los datos de más de 10.000 delincuentes reincidentes, así como los de 84.000 presos de las cárceles de Inglaterra y Gales. El suceso es tan grave que el Ministerio del Interior ya ha puesto en marcha la maquinaria para esclarecer qué ha podido pasar. Por desgracia, el incidente se suma a las consecutivas pérdidas (o robos) de ordenadores y documentación confidencial en el país.
Fuentes oficiales han informado que, además de los datos antes mencionados, también se ha perdido información perteneciente a la Policía. En concreto los datos de 30.000 personas condenadas más de seis veces a lo largo del último año dentro del país. La noticia no podía llegar en peor momento, ya que el mes pasado el Gobierno dio a conocer que se había extraviado o robado la friolera de 747 ordenadores portátiles, que contenían información del Ministerio de Defensa. La cifra no supera los 10.000 portátiles que se pueden encontrar en los aeropuertos, pero es que 747 dan para mucho y más si se trata del Gobierno británico.
El Partido Conservador en la oposición no ha escatimado esfuerzos en poner al Gobierno de vuelta y media. Y es que han cometido demasiados errores en muy poco tiempo. Durante el mes de junio se perdieron documentos confidenciales en varios trenes de cercanías, que se referían a la organización terrorista Al Qaeda y a otras cuestiones sobre Iraq. Y por si esto no fuera poco, el año pasado, en el transcurso de un envío, desapareció un disco duro con los nombres y cuentas bancarias de millones de personas. Increíble, pero cierto.
Fotos de maz hewitt y _ES / Vía: El Mundo
