Se trata de un fenómeno sinigual que se da en la zona de Queens en Nueva York. Un grupo de jóvenes inmigrantes de Trinidad y Tobago se reúnen a diario para fabricar sus propias Stereobikes, unas impresionantes construcciones sonoras plagadas de altavoces que cobran vida bajo sus escuálidas bicicletas Bmx.
Una moda de lo más sorprendente que no ha dejado indiferente al director de cine Nicolas Randall que, acompañado por Joe Stevens, ha filmado un documental sobre la historia real de estos jóvenes. Su título Made In Queens. He aquí un pequeño adelanto.
Algunas de estas Stereobikes de este barrio underground tienen un valor superior a los 4.000 dolares en equipos de sonido y luces. Y es que estos auténticos genios del sonido y amantes del Reggae y el Ska no se andan con menudencias. Ya conocíamos a gente capaz de crearse el subwoofer más grande del mundo. Pero, al menos, éste no salía de casa.
Estos chavales han encontrado una forma de expresar su creatividad juvenil. Aunque no sabemos que opinará el vecindario, que debe retumbar cuando esas torres de altavoces móviles echan a andar. Los artistas siempre fueron unos incomprendidos. O, al menos, eso dicen.
Vía: Dvice
Guau!!!!!! M he quedado sorprendida, habia visto bicicletas con sonidoy con pantallas pero nada asi.
Saludos…