Nokia vuelve a repetir la jugada que probó por primera vez con el Nokia 6555: un móvil con un reloj de manecillas para mostrar la hora en su pantalla externa. El nuevo terminal que incluye este detalle retro se llama Nokia 3610 fold y guarda muchos otros puntos en común con su predecesor, como el diseño de tipo concha o un equipamiento sencillo que lo destina a ser el típico terminal que los operadores ofrecen a precio económico.
La pantalla externa para el reloj analógico virtual es de 1,36 pulgadas (128 x 160 píxeles), mientras que en su interior lleva la pantalla principal de dos pulgadas (240 x 320 píxeles). En posición cerrada tiene unas dimensiones de 99,6 x 44,3 x 19,6 mm, con un peso de 97 gramos y carcasa en gris metálico que optará por cuatro colores distintos para el marco: azul, rojo, rosa y verde.
El móvil cumple con las funciones básicas: llamar y enviar mensajes. Tiene una autonomía de 278 minutos en conversación y 457 horas en espera. La cámara es muy sencilla, con 1,3 megapíxeles de resolución, autoenfoque y grabación de vídeo a 176 x 144 píxeles. Un móvil pensado para satisfacer las necesidades del usuario medio.
Cuenta con una salida de auriculares de 2,5 mm, conexión Bluetooth con perfil A2DP para usar auriculares inalámbricos y cable microUSB para transferirle música guardada en el ordenador. Eso sí, no podremos meter muchas canciones a no ser que usemos una tarjeta de memoria microSD, con un máximo de 4 GB de capacidad.
Este Nokia 3610 fold será lanzado al mercado durante el tercer trimestre del año con un precio libre 125 euros. Eso sí, a la hora de la verdad habrá que añadirle los impuestos (y restarle la financiación de los operadores que lo ofrezcan en alguna modalidad de contrato y/o con sus programas de puntos).
Vía: Nokia
