Panasonic lleva un tiempo realizando una apuesta por los ordenadores portátiles superresistentes. De esos que pueden resistir salpicaduras, vibraciones, temperaturas extremas y caídas de media altura, como el ultraligero de tipo tableta presentado en CeBIT 2008. La firma japonesa acaba de anunciar dos nuevas versiones del Toughbook CF-52, el modelo que opta por el tamaño de pantalla más habitual en los portátiles: 15,4 pulgadas.
Protegidos por una carcasa de aleación de magnesio, estos portátiles presentan el aspecto de un maletín reforzado, pues la propia carcasa lleva un asa extraíble para su transporte. A esta protección se le suman un revestimiento de espuma para su disco duro de 160 Gigabytes y el uso de amortigí¼adores para la pantalla y los componentes internos, que le permiten resistir vibraciones y caídas accidentales desde 67 cm de altura.
El teclado y el touchpad están convenientemente protegidos contra salpicaduras, para que ningún líquido dañe su interior. Y el equipo puede resistir temperaturas de entre -20 y 60 grados centígrados. Semejante coraza provoca que estos portátiles no destaquen precísamente por su peso, que asciende hasta 3,4 kilos. Pero tienen otros puntos fuertes, como los avances técnicos que Panasonic ha decidido incluir en estas dos nuevas entregas.
Sobre todo en la High Version, que se acoge a la nueva plataforma Montevina de procesadores Intel Centrino 2. Más concretamente, se trata de un Intel Core 2 Duo P8600 a 2,4 GHz. Esta versión de gama alta consigue una autonomía de 4 horas. La Standard Version baja las prestaciones del procesador, que se queda en un Intel Core 2 Duo P8400 a 2,26 GHz, pero su autonomía sube hasta las 7 horas.
Se trata en ambos casos de máquinas capaces, que contarán con entre 1 y 4 GB de memoria RAM, lector-grabador de DVD y un completo apartado de conexiones con y sin cables. En las primeras, destacan los cuatro puertos USB, un puerto FireWire, una salida VGA para monitor externo, una conexión eSATA para discos duros y un lector de tarjetas compatible con SD, SDHC y Express Card.
En lo inalámbrico, la conexión Wi-Fi es compatible con el último estándar 802.11n, más veloz que los anteriores, que podrá ser completado con el HSDPA para las líneas teléfonicas de alta velocidad. También cuenta con el ya casi inevitable Bluetooth, para transmitir pequeños archivos desde el móvil y otros dispositivos o usar periféricos como el ratón sin ayuda de cables.
Gráficamente no son nada del otro mundo, pues lejos de ser máquinas pensadas para videojuegos o películas, están más enfocadas como portátiles para trabajos en condiciones extremas o en las que un portátil medio puede correr riesgos. Hablamos de sectores como el de la construcción o profesiones en las que preservar los datos informáticos ante cualquier tipo de incidente es fundamental. Por este mismo motivo, también llevarán un lector de huellas digitales que impedirá que ningún amante de lo ajeno acceda a los documentos guardados en su interior.
Llegarán al mercado español en septiembre y, como puede intuirse al tener en cuenta su «coraza», con precios bastante por encima de la media. La Standard Version comenzará en torno a los 2.000 euros, mientras que la High Version sube su precio de partida a los 3.000 euros. Es lo que hay que pagar por no preocuparse en absoluto por los golpes, rozaduras y salpicones que puede sufrir un portátil en algunas actividades profesionales.