Y terminamos las notas sobre la Feria Attic 08 con unos cuantos inventos curiosos. Aparatitos diseñados para todo el que quiera poner un gadget original en su vida:
El primero de esta última entrega se llama Lightwedge. Es una especie de lector «especial parejas» porque este pequeño utensilio podría mejorar la convivencia con tu cónyuge. Es originario de la isla de Nantucket (Massachussets) y está diseñado para las personas aficionadas a la lectura cansadas de que su pareja diga aquello de: ¡¿Quieres apagar la luz?!
El Lightwedge se engancha al lomo del libro en cuestión y lo ilumina individualmente sin molestar a nadie. Cuesta unos 22 euros cada unidad y ya lo están fabricando con motivos decorativos y funcionalidades diferentes. Toda una inversión para conservar la armonía familiar.
El penúltimo es el Digital Day Cownter. O, ¿cuánto tiempo hace que está abierto el jamón? A partir de ahora ya no tendrás que hacer memoria para saber cuántos días hace que un producto aguarda paciente en tu nevera. Este reloj digital, nació de la discusión entre una pareja para saber cuánto hacía que estaba abierto el potito de comida de su bebé. Luego, este señor y un amigo suyo decidieron crear un reloj que se pega en el tupper, bote o caja y nos da la información del tiempo que ha pasado desde que lo abriste. Los usos son variados, pueden ir desde los potitos de un bebé, hasta medicamentos, productos culinarios o incluso para llevar un control de cuánto hace que le diste de comer a tu pez, o regaste las plantas. El precio puede oscilar entre tres y seis euros cada uno, según sus características. Ideal para despistados.
Y cerramos con Diet Floor. ¿Quien nos iba decir que un buen día podríamos controlar nuestra dieta delante de la mismísima nevera? El creativo Pep Torres en colaboración con TAU Cerámica, ha creado la primera baldosa que te ayuda a hacer régimen.
Se puede situar delante de la nevera y ella misma se encarga de averiguar si alguien está pasando demasiado rato por ahí en horas de picoteo. Gracias a un sensor puede calcular el peso y lanzar mensajes de aviso personalizados al individuo que esté hurgando en la nevera, para recordarle que está haciendo régimen. Asimismo TAU ha presentado una variante para controlar a los que pasan demasiado rato delante de la máquina de café en horario laboral. Otro cacharro más para sumar con el Yummi Kitchen y hacer convertir la cocina en algo más tecnológico.
Grandes inventos para una feria que se conforma, como mínimo, en mantener el resultado de visitantes del año pasado y en la que salta a la vista que se ha trabajado a fondo. La exposición de inventos ya comercializados, ha sido sin duda la estrella de una muestra que a la vez pretendía ser un espacio de comunicación y aprendizaje para creativos y mentes inquietas.
¡Hasta el año que viene!