Los primeros fallos del iPhone

Todo un éxito de ventas: 525.000 iPhones vendidos en 48 horas. El nuevo teléfono de Apple salió a la venta el pasado viernes, aunque por el momento sólo se encuentra en Estados Unidos. Pero no todo han sido buenas noticias para la compañí­a de Steve Jobs ni para la operadora AT&T, que ofrece este terminal en exclusiva. Empezando por los problemas de activación que han sufrido algunos de los nuevos propietarios de este teléfono de pantalla táctil.

Según las cifras oficiales, un 2% de usuarios han tenido estos problemas, que AT&T ha achacado a dificultades en los trámites administrativos y tecnológicos para activar los teléfonos. Según Associated Press, los servidores se sobrecargaron por la gran cantidad de peticiones de activación durante el fin de semana. Algunos bloggers, como Thomas Hawk o Steve Rubel, han descrito en sus bitácoras cómo consiguieron activar sus iPhones paso por paso y llamada por llamada.

Según la operadora casi todos los problemas han sido ya resueltos. Pero durante los primeros dí­a de vida del iPhone se han descubierto dos carencias de compatibilidad de esta máquina: uno de software y otro de hardware. El primero se produce al conectar el teléfono a un ordenador equipado con algunas versiones de Windows. El segundo, cuando intentamos enchufar auriculares de algunas marcas.

El primer fallo ya ha sido confirmado por la propia Apple. Una de las condiciones para activar el iPhone es registrarlo en iTunes, la tienda virtual de música de Apple. El problema estriba en que, si lo hacemos desde un ordenador con Windows Vista o XP para procesadores de 64 bits, el registro falla y la página de iTunes muestra el siguiente mensaje: “The software required for iPhone is not installed” (en inglés: «El software requerido para el iPhone no está instalado).

Un problema que puede parecer poco relevante, ya que estas versiones del sistema operativo de Microsoft están poco extendidas, porque dependen de la arquitectura de ordenadores x64, que está en fase inicial y su uso es de momento minoritario. Pero Apple llevaba tiempo anunciando que su nuevo terminal serí­a compatible con las últimas versiones de Windows, sin mencionar esta excepción. ¿Publicidad engañosa?

En cuanto a los auriculares, los problemas de compatibilidad se deben a la forma ahuecada de la salida de audio del iPhone, que impide la correcta conexión si la clavija no se amolda perfectamente. Los auriculares de serie del iPod sí­ son perfectamente compatibles, y curiosamente también los del Zune, el reproductor de música de Microsoft.

Pero con otros modelos de auriculares la clavija no entra del todo, y por tanto el sonido llega al auricular de manera defectuosa (si llega). Los chicos de engadget han probado con varios, y han tenido problemas con modelos de marcas como Sony, Grado o Sure. Y es que parece que al iPhone no le gusta lo «genérico». Aunque claro, siempre podremos comprarnos un adaptador especial para nuestros viejos cascos de toda la vida. Lo importante es la exclusividad, lo demás es un lujo adicional.