Ciberdespacio en España, Ciberrápido en Holanda

¿Quién ha dicho que en España Internet es de banda ancha? El ciberdespacio lo llamamos nosotros. Es caro, lento y encima se estropea. Ayer a las cuatro y media de la tarde, Telefónica dejó sin apenas poder navegar a miles de sus clientes de toda España. Y la operadora confirmó que era cierto. El motivo, según los eficientes responsables del ciberdespacio en España, una incidencia técnica agravada por el fuerte tráfico de datos.

Además, el teléfono de atención al cliente 902 357 000 se colapsó durante toda la tarde.

Aunque esto es algo que le puede pasar a cualquier operador, el problema es que llueve sobre mojado. Ocurre en España, un paí­s, supuestamente avanzado y europeo, pero con un acceso a Internet propio del tercer mundo.

Aquí­ Telefónica nos ofrece (cuando funciona) un acceso de 1 Mega de bajada (cuando descargamos correo o se abre una página web) y 320 Kbps de subida (cuando enviamos mensajes y damos orden de abrir una página) por la bonita cifra de 46,30 euros (por supuesto IVA incluido). Y ¿qué es lo que se ofrece en otros paí­ses del primer mundo?.

Resulta que en Booxmer, un pueblo del sur de Holanda, una empresa de cable ofrece conexión a Internet con 40 MB de bajada y 20 MB de subida. La empresa se llama Essent Kabelcom, y ofrece este servicio por 75 euros al mes.

En España, caí­das generales del servicio a parte, no tenemos conexiones a Internet tan rápidas (con subida y bajada incluidas). Y además los proveedores no cumplen lo que parece que prometen. Hay que decir en honor a la verdad que si leemos con lupa las ofertas las operadoras sí­ cumplen. Y es que, los muy pillines dicen: velocidad HASTA… MEGAS… Claro que, de esa forma, yo también ofrezco desde mi casa velocidad de HASTA 1.000 MILLONES DE MEGAS. Luego, con dar lo que me dé la gana, asunto arreglado.

De cualquier forma, en España, las velocidades que nos ofrecen tampoco son simétricas. Es decir, podemos tener varios megas de bajada (descarga de datos desde Internet), pero a la hora de subir (enviar datos a la red) la cosa es mucho más lenta y limitada, y en la mayorí­a de los casos se mide todaví­a en pocos centenares de Kbps.

Los casi 30.000 habitantes de Booxmer disfrutan desde hace un año de los servicios de esta empresa holandesa gracias a un sistema de cableado especial. El último tramo de cable hasta el domicilio era coaxial (y no un par de cobre como en España) y fue sustituido por fibra óptica (Fiber to the Home o FttH). Todaví­a mucho mejor.

Otro detalle curioso de lo que ocurre en los paí­ses con Internet de primer mundo: los chicos de Essent Kabelcom te instalan la lí­nea en unas pocas horas. Actualmente, nosotros tenemos que esperar cerca de un mes para empezar a navegar desde que firmamos el contrato.

Son las cosas del acceso a Internet cañí­. Ese ciberdespacio que tan primorosamente nos ofrecen nuestras operadoras…