La aplicación Google Maps ha pasado a formar parte de nuestras vidas. Ya rara vez vamos a algún sitio nuevo sin antes consultar el mejor camino con ella, o su web en ordenadores. Incluso podemos ver cómo es la zona, si habrá sitio para aparcar (o aceras donde dejar la moto). Y, de camino, nos puede sugerir itinerarios más despejados porque actualiza rápidamente el estado del tráfico. Pero todo esto, suponemos, ya lo tienes controlado y sabes cómo manejarlo. Lo que quizás no sabías es que Google te puede llevar de visita a sitios extraños, incluso imaginarios. O tan poco a mano como ¡la Estación Espacial Internacional!
Paseo espacial
Seguro que alguna vez has soñado con ser astronauta, o por lo menos hacer un viaje espacial. De momento, salvo que seas muy rico (¡o astronauta!) está complicado hacerlo realidad. Pero sí puedes hacerlo realidad… virtual: aquí tienes todo lo que necesitas para pasearte por la Estación Espacial Internacional. No necesitas pasar pruebas físicas, ni pagar millonadas, ni siquiera tener a mano una bolsa para el mareo por ingravidez.
Podrás ver dónde han estado residiendo astronautas de todo el mundo los últimos 16 años, por turnos. Es la primera vez que Google lleva su Street View más allá de la Tierra. También estrena un sistema de notas que te explican qué es cada cosa: una visita guiada en toda regla. La ISS consta de 15 módulos y la aplicación te permite desplazarte entre ellos.
¿Cómo lo han hecho? Evidentemente el coche de Google con su cámara de 360 grados no ha viajado hasta allí. Un acuerdo entre Google y la NASA ha permitido hacerlo usando cámaras normales que tenían allá arriba. El astronauta europeo Thomas Pesquet las recopiló y Google las ha unido para crear las vistas.
De museos
Mucho más terrenal es esta otra posibilidad que ofrece Google Street View: visitar algunos de los museos más famosos del mundo. Tampoco hace falta viajar, ni hacer colas, ni darse palizas de horas en pie. No están todos, ni todas las obras, pero suponemos que es cuestión de tiempo el que así sea.
Mientras tanto puedes buscar en Google Maps un museo que te apetezca, amplías y verás qué posibilidades tienes. Si cuando pinchas en el muñeco ves varias esferas azules, cada una es una vista 360 grados. Si la esfera es naranja, es que ahí tienes vistas interiores completas. En modo Street View (acercándote o llevando el muñeco a ese punto) podrás ver partes del museo por dentro y moverte.
Hay muchos museos que han firmado acuerdos con Google y permiten visitas muy completas. Si te gustan los coches y las motos estás de suerte porque museos como el Honda (en Japón), el Ducati o el Lamborghini (en Italia ambos) están en el menú. Si te gustan los aviones, la lista es grande, pero Duxford en Reino Unido es obligatorio, y el de técnica de Berlín otra oportunidad.
Obras de arte
Como decíamos no todos los museos tienen acuerdos con Google para poderlos visitar con Street View. Y en algunos casos la visita está bien… pero sólo te dan más ganas de ir en persona a disfrutar en directo de las obras de arte. Pero hay otra posibilidad, también de la mano de Google: se llama Arts&Culture.
Aquí tienes… ¡todo! Están los museos en los que se puede pasear en modo Street View, hay obras de arte de otros sitios para poderlas admirar en detalle. Cada cuadro puede ampliarse mucho, son imágenes en alta resolución, aunque con el botón derecho desactivado para impedirnos guardar copias sin permiso.
Viajar en el tiempo
Sí, también puedes ver cómo estaba un edificio, calle o zona un tiempo atrás. Como siempre, buscas la zona, amplías y llegas a la vista Street View ya sea ampliando o con el amigo naranja. Una vez en esa vista, fíjate en la ventana de la izquierda y arriba. Ahí tienes la dirección que estás viendo (dónde es) pero también hay un reloj y una indicación de fecha. Es la fecha en que se tomó esa imagen.
Si pinchas en el reloj, y hay más imágenes anteriores, Google te desplegará un menú con otra ventanita. Allí verás la imagen desde la misma perspectiva… pero con otras fechas y tal como estaba entonces. Por ahora, esto sólo funciona para viajar al pasado, os avisaremos en cuanto Google active la función de adelantarnos en el tiempo (no sin antes buscar una casa de loterías a ver qué números tocarán).
Yo no quiero salir…
Google Maps es muy útil, pero a veces puede rozar la falta de privacidad. Imagina que te han fotografiado mientras tomabas el sol en la piscina. O que tenías un cartel anunciando algo, pero se vendió y ahí sigue, saliendo, y tú recibiendo llamadas. Google lo sabe y por eso pone bastante fácil dejarnos eliminar información: dejarán la imagen borrosa en esa zona.
Para ello, primero tienes que ir hasta el lugar en concreto. Entras en Maps desde el ordenador y buscas la dirección donde quieres borrar algo. Una vez allí, amplías y pasas al modo Street View hasta que estés viendo aquello que quieres difuminar. Entonces, abajo a la derecha, haz clic en “informar de un problema”. Se abrirá un menú nuevo, que entre otras cosas contiene la imagen visible de esa zona tal como la tenías. Puedes moverla, para dejar encuadrada la zona que quieres pedir eliminar. Como ejemplo hemos puesto un cartel en un terreno. Ahora ya sólo debes pedir qué se deja borroso, y por qué, además de dejar tu contacto por si quieren preguntarte algo más.
