La ciencia es sabia y simple. Si tu cerebro es activado bajo la presencia de un estímulo de gran terror, ordenará al corazón latir más rápido para distribuir la adrenalina por todos los músculos y poder utilizarlos rápidamente. Algo realmente conveniente en momentos de peligro en los que salir por patas. Además, si el miedo es extremo incluso puede dejar de controlar los esfínteres para liberar la carga del organismo y dejar paso a una huida ágil aunque sucia. Vaya, que te puedes cagar de miedo. Los creadores del juego Outlast lo saben bien, y por ello han creado unos pañales especiales para sus jugadores. No, no es coña.
Los juegos de terror llevan ya un par de años dando muchas alegrías a base de sustos a los jugones más atrevidos. Y es que, procedentes del género Indie y con presupuestos más que escuetos, algunos títulos han conseguido generar mucho miedo. Uno de sus máximos exponentes es Outlast, que llega con una secuela y un pañal para los jugadores más asustadizos bajo el brazo. Se acabó eso de acabar sucio de cintura para abajo después de un rato de juego. No más fregoteo del sofá para eliminar malos olores. Ya están aquí los Underscares (en referencia directa a underwear, que en inglés significa ropa interior, y a scare, susto).
Por si la idea fuese poco original per se (algunos dirían que es original que te cagas), no solo lo han hecho realidad, sino que están dispuestos a distribuirlo gracias a la ayuda de la colaboración. Por ello han lanzado una campaña en Kickstarter, la conocida página donde presentar proyectos para financiar con la ayuda del público. En su página detallan con bastante ironía todas las ventaja de esta prenda, con la que aseguran máximo confort a los jugadores durante sus terroríficas partidas a la saga Outlast.
No hay que perder de vista que todo este movimiento es una clara campaña de marketing o publicidad ante la próxima publicación de Outlast 2, que se prevé para el primer trimestre de 2017. Sin embargo, desde Red Barrels, la desarrolladora del juego, han decidido tomarlo bastante en serio. Así, si se logra la financiación y el apoyo del público, se distribuirán diferentes pañales especiales. Porque sí, hay varios modelos según lo generoso que se sea con el proyecto.
Si se ofrece 10 dólares, es posible conseguir un parche con un crucifijo invertido y los patrones para crear un Underscares propio. Por 55 dólares, más de 50 euros, se recibe un código de Steam para descargar Outlast 2 y el modelo básico de los Underscares. Si se sube la apuesta con una contribución de 75 dólares, se consigue el juego y un modelo Deluxe de estos pañales. Por último, aquellos más generosos que paguen 6.666 dólares, se harán con seis pañales Deluxe, seis códigos del juego y, lo más sorprendente, una capilla de unos 5 metros de alta creada para la promoción del título. Casi nada.
Los Underscares presumen de haber sido diseñados a conciencia. Más allá del logotipo del juego en la segunda zona más importante de la anatomía humana (si es que pensamos con el cerebro), el diseño presume de comodidad a la hora de ajustarse a la cintura y las piernas para evitar el despliegue de aguas residuales de cualquier tipo. Destaca, en la versión Deluxe, el pendiente con lucecita que alumbra en la oscuridad o el apartado creado para llevar una pequeña bebida. No vaya a ser que con tanto esfínter relajado el jugador se deshidrate.
Más info y contribuciones: Underscares
