Corrí­an los locos años 70, se separaban los Beatles, triunfaban los pantalones campana y terminaba la guerra de Vietnam. En medio de este caos, unos tí­os muy listos de la empresa IBM, van y se inventan el disquete.

Y ¿para qué lo querí­an? Pues la verdad, para casi nada, porque en aquellos disquetes apenas cabí­an unos pocos archivos informáticos. Para que os hagáis una idea, en un lápiz USB de los actuales podemos meter los ficheros de 3 millones de aquellos disquetes.

Al principio. Eran de cartulina con un disco flexible dentro. Luego les dio vergí¼enza, subieron la capacidad y los metieron en una carcasa de plástico más aparente.

Las grabadoras de CD, a finales de los 90, fundieron al disquete y luego, los lápices de memoria lo remataron. Pero esa, es otra historia.

Si quieres ver cómo era el disquete y escuchar a la gente de la calle hablar sobre sus recuerdos del mismo, te invitamos a ver el ví­deo de Regreso al Pasado. Dale al PLAY en el ví­deo de arriba.

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