Walter Deppeler es Vicepresidente Corporativo de Acer y Presidente de Acer en Europa, Oriente Medio y ífrica. Cuenta con una experiencia de más de 15 años dentro de diversos puestos en la compañía taiwanesa, y se ha convertido en una de las piezas clave en la transformación que Acer está llevando a cabo dentro de su división profesional. Una evolución que tiene mucho que ver con un cuidado mayor de la imagen de marca y una apuesta decidida por la innovación y por segmentos como el de la educación. Con motivo del evento internacional de Acer en Amsterdam para presentar sus últimas novedades, hemos tenido la ocasión de entrevistar a este ejecutivo.
¿Cuáles son sus objetivos para el futuro próximo en la división profesional?
Ahora mismo nuestra división dedicada a las empresas supone un 20% de todos los ingresos de Acer. Nuestro objetivo para los tres próximos años es aumentar ese porcentaje hasta el 35%.
¿Tienen pensado hacer algo específico en España o mantendrán la misma estrategia que a nivel global?
En principio, nuestra estrategia de negocio tanto orientada a Pymes como al sector de la educación sigue un hilo conductor común. Pero somos conscientes que en cada país europeo existen diferentes características.
Acer ha evolucionado mucho en los últimos años en el campo profesional. Se está intentando cambiar la concepción del público sobre la marca. ¿En qué punto de esta evolución se encuentran?
Históricamente, Acer utilizaba un mismo grupo de trabajo tanto para la división de consumo como para la división profesional. Lo que hemos hecho desde hace casi un año ya es comenzar a separar la división profesional para crear un grupo de trabajo específico que se adecue a la realidad del mercado. Lo que también hemos hecho es desarrollar dispositivos innovadores como el nuevo TravelMate X313 y nos hemos centrado en segmentos específicos como el de la educación. Equipos como portátiles, tablets e incluso propuestas diferentes como los chromebooks están generando un importante impacto en los colegios y universidades.
Supongo que con el impacto de los chromebooks se refiere a Estados Unidos…
Es cierto que existen diferencias notables entre regiones como Estados Unidos y países como España o Alemania. Pero los chromebooks también están teniendo un buen desarrollo en zonas como ífrica o Arabia Saudí.
Parece extraño que estén triunfando en zonas donde la calidad de las conexiones es inferior (los chromebooks necesitan la conexión a Internet para funcionar de manera completa).
Google se está moviendo muy rápido. En estos países emergentes los estudiantes no tienen tanto dinero para comprar equipos más caros y en algunos casos se están creando programas desde el gobierno para desplegar mejores conexiones. Nosotros estamos inmersos en varios proyectos piloto para introducir chromebooks en estas zonas.
Hablando de proyectos, Acer colabora activamente desde hace años con European Schoolnet para estudiar la introducción de las nuevas tecnologías en colegios de toda Europa. Uno de los proyectos piloto consistió en probar la introducción de netbooks en las aulas. Después de ese último intento, ¿podemos decir hoy en día que los netbooks están muertos?
Para ser honesto, hoy en día los netbooks ya han sido reemplazados casi por completo por dispositivos convertibles. Por ejemplo, si coges una tableta como la Acer Iconia W510P, puede funcionar perfectamente como si fuera un netbook cuando lo utilizas con el teclado. El mercado de netbooks fue un gran mercado hace unos pocos años pero ha sido prácticamente destruido por los movimientos de Intel y Microsoft.
¿Cambia mucho el tipo de dispositivo que demandan los estudiantes según la edad y el lugar?
Depende mucho. Entre seis y nuevos años los dispositivos más demandados son tablets y equipos táctiles de tamaño pequeño, mientras que en institutos y universidades se demandan equipos con pantallas mayores. También es muy importante por supuesto la capacidad adquisitiva de los estudiantes. Por ejemplo, en una universidad privada india se demandaba lo último en tecnología con ultrabooks táctiles. También es una cuestión de equilibrio entre software, servicios y lo que el propio producto puede hacer.
¿Cree que ahora mismo tienen una oportunidad de desarrollo del segmento profesional en España?
Creo que tenemos una oportunidad, sí. Pero tenemos que construirla de forma sostenible. España sigue siendo un mercado importante a pesar de la crisis económica, especialmente en las pequeñas y medianas empresas. En los últimos meses hemos visto como ha disminuido el número de ventas de nuestros equipos de gama baja pero estamos haciendo una fuerte apuesta por la innovación que está dando buenos resultados.