Twitter cada vez se parece más a Facebook. Y no por las razones que Sean Parker, fundador de Napster y exdirectivo de Facebook, ha presentado precisamente en la red social de los 140 caracteres. Si en algo se acercan cada vez más ambos servicios es en la cuestionable agilidad que demuestran ambas para introducir cambios y novedades muy frecuentemente. Demasiado frecuentemente, de hecho.
En esta ocasión, Twitter empieza a introducir un par de novedades derivadas de su interfaz de uso web. Sabes que hay muchas opciones para gestionar nuestra cuenta en este servicio usando clientes dedicados, como TweetDeck o TweetCaster, entre muchísimos otros. Pero siempre queda la opción de usar el propio gestor desde navegador para poder actualizar entradas, consultar actualizaciones de nuestros contactos o echar un vistazo a las menciones o mensajes directos que protagonizamos como usuarios.
Las novedades se centran en la desaparición de las pestañas de menciones y retuits. Es decir, por un lado, cuando los cambios se hayan acomodado en las cuentas de todo el mundo, ya no veremos las menciones que hacen a nuestras entradas en una pestaña particular, sino que en el mismo apartado se concentrarán menciones y retuits de nuestras entradas. En este caso, la pestaña pasará a llamarse @usuario (y tendrá la misma naturaleza que la columna «mentions» de TweetDeck).
Por otro lado, la pestaña de retuits también desaparece. El retuit se da cuando una entrada de un usuario es literalmente reproducida por otro en su línea de tiempo de Twitter, respetando la fuente original y, en ocasiones, rellenando espacio con algún comentario complementario. Podemos identificar un retuit por la aparición de las iniciales RT delante del usuario que se comporta como fuente original de la entrada.
Así, como decimos, la pestaña dedicada específicamente para esta tarea pasa a mejor vida. Hasta ahora, en el apartado de retuits podíamos consultar tres espacios: los retuits más populares de nuestra línea de tiempo, los que habíamos efectuado nosotros con las entradas de nuestros contactos y las que otros usuarios habían hecho de nuestros tuits. No obstante, esta pestaña pasará a diluirse entre otros apartados de la interfaz de gestión.
Y como recordarás, hablábamos al comienzo del artículo de Sean Parker. Y es que el que fue tormento de la industria discográfica ha expresado, precisamente a través de Twitter, su recelo ante los cambios de esta red social, señalando, sin pelos en la lengua, que la intención de los responsables de este servicio es seguir la estella de Facebook. De hecho, no tiene reparos Parker en lanzar un órdago al equipo que respalda Twitter con una pregunta que está más cerca de lo retórico y desafiante que de un verdadero sentimiento de curiosidad: «¿Tiene Twitter envidia de Facebook?».
