Cada vez son más los internautas que deciden recortar los gastos de sus vacaciones, y lo hacen a costa del alojamiento. Al fin y al cabo, si no van a estar en su casa habitual, porque no alquilarla mientras están fuera, o intercambiarla con alguien que viva en la ciudad de destino. Hay un intenso mercado de intercambio alrededor de esta idea, y cada vez es mayor el número de páginas que por un módico porcentaje hacen de intermediarios.
Claro que la aventura no siempre termina bien. En ocasiones, se puede convertir en la peor de las pesadillas. EJ, una joven aficionada a los viajes y residente en San Francisco, decidió alquilar su casa durante la semana que iba a estar fuera utilizando los servicios de la página Airbnb.com. Tras encontrar un inquilino que parecía serio y solvente, inició su viaje. A su vuelta, al intentar entrar en su casa, descubrió que se iniciaba otro tipo de viaje.
Al abrir la puerta de su casa, se encontró con que los inquilinos la habían convertido en auténtica zona de guerra. Habían cambiado los muebles de sitio, habían destrozado las tapicerías, e incluso habían reventado una puerta tras la que la ingenua joven había guardado sus posesiones más preciadas. Los vándalos robaron sus ordenadores, sus tarjetas de crédito, sus talonarios de cheques, la fotocopiadora, y utilizaron sus datos bancarios para hacer todo tipo de compras en internet.
Para rematar la faena, quemaron buena parte de sus posesiones en la chimenea, incluyendo las sábanas de la cama. La joven ha relatado la aventura en su blog, criticando sobre todo la falta de reflejos de los responsables de la página Airbnb.com, que tardaron más de un día en responder a su llamada de auxilio, y que además le sugirieron que eliminara el relato de su pesadilla del blog. Claro que por estos días esperaban una inyección de capital de 112 millones de dólares.
A estas alturas, la joven sigue sin casa, sin posesiones, y sin noticias de los responsables de la página que se han limitado a expresarle su solidaridad, y que le han asegurado que están colaborando activamente con la policía. Eso sí para cubrirse en salud, ahora ofrecen un seguro contra inquilinos vandálicos y ladrones de 50,000 dólares, que entrará en vigor el 15 de agosto, pero quién va a reclamarle el dinero una empresa que tiene su domicilio en San Francisco. Si tienes tentaciones de alquilar tu casa cuando no la usas, piensatelo dos veces.
