De momento, se trata sólo de un prototipo sobre el que trabajar. Pero ya supone un interesante anticipo de lo que está por llegar en el futuro de los accesorios que equiparán los móviles del futuro. Hablamos de una cámara de la casa japonesa Sony que equipa una potencia de 17,7 megapíxeles, basada en un sensor CMOS y que logra una calidad de vídeo realmente asombrosa.
El fabricante no ha detallado cuándo empezaríamos a ver móviles con semejante musculatura de foto y vídeo, aunque los esfuerzos que le está dedicando a la investigación dan buena cuenta de la proyección de la empresa que, recordemos, recientemente se ha postulado como el posible suministrador de sensores para los futuros dispositivos móviles de Apple.
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