Renovarse o morir. Eso deben de pensar los fundadores de Google, que pese a presentar unos excelentes resultados económicos en 2010 han debido verle las orejas al lobo. Es por ello que han decidido cambiar la cúpula directiva, más concretamente en el puesto de director general (CEO). Eric Schmidt dejará las riendas de la empresa a uno de sus cofundadores, Larry Page.
El motivo, según ellos, es acelerar el proceso de toma de decisiones y clarificar el rol de los tres implicados. Pero seguramente ha pesado y mucho la pérdida de imagen de la empresa a ojos del gran público, sobre todo tras el escándalo de Google Street View. Larry Page, de un perfil más cercano, podría ayudar a recuperar un crédito que empezaba a desgastarse. Mientras, el otro cofundador, Sergey Brin, se ocupara de otras ramas de la empresa.
Leer todo sobre Google, el CEO de Google Eric Schmidt dejará su puesto a uno de los fundadores
Wilkinson, a former Navy base that iss minutes search engine
marketing services from Google’s headquarters in Mountain View, Calif.