Mucho han cambiado los aires en Microsoft. Lleva ya unos años empeñada en mostrar publicamente su preocupación por obtener un sistema operativo más seguro, y dentro de su compromiso con la seguridad sigue apostando por su propio antivirus, el Microsoft Security Essentials, del que acababa de sacar la versión 2.0, aunque todavía está en estado de beta.
No es el mejor antivirus del mundo, pero sí merece figurar entre los cinco o seis mejores entre los que se ofrecen de forma gratuita. Está diseñada para que se integre de forma natural y sencilla con el sistema operativo, y se actualiza periódicamente.
Esta nueva versión incorpora cuatro mejoras. En primer lugar, se ha integrado de forma completa con el cortafuegos de Windows. Además, ofrece mejor protección contra amenazas procedentes de Internet. El sistema de inspección de redes es una defensa frente a ataques procedentes de redes internas, con lo que se está combatiendo el espionaje dentro de la empresa pero también evita que ordenadores infectados no acaben con otros dentro de la misma red local. Por fin, se ha mejorado el motor de protección, y se ha mejorado la velocidad y la tasa de detección de infecciones.
Inicialmente irritó mucho a los usuarios de fuera necesaria la participación en la red global Spynet, que permite a los de Microsoft obtener información instantánea y global sobre nuevas infecciones. En esta nueva versión del antivirus ya no es necesario activar esta opción
