Para los amantes del buen sonido, el Yamaha CDR-HD1500 puede ser una buena adquisición, sobre todo para aquellos que tienen grandes colecciones de música en CD. Es un equipo que tiene un disco duro de 250 GB, y que además dispone de un reproductor grabador de discos compactos. Es posible hacer grabaciones cruzadas entre ambos sistemas.
La ventaja de grabar los discos ópticos en el disco duro, sobre todo si se graban sin pérdida, reside en que así se detiene el deterioro al que se ven sometidos cada vez que se reproducen. La velocidad es muy alta cuando se pasa la música del CD al disco duro, y también de disco duro a un CD grabable. Desciende a la mitad cuando el destino es un disco regrabable. El aparato cuesta 800 euros.
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