El Mundial de Fútbol de Sudáfrica ha provocado variados y contundentes efectos sobre el planeta, pero mucho más sobre la comunidad que vive en el país de acogida, cambiando sus hábitos e incluso transformando su manera de ver y utilizar la tecnología. Según indica un estudio de Naciones Unidas, el continente africano ha registrado un aumento de un 550% cuanto a la utilización del teléfono móvil, algo en parte debido a la labor que está realizando la compañía MovilBank.
Su función es la de recuperar los teléfonos móviles averiados, inservibles o inutilizados para repararlos y enviarlos a países como Gandia, Nigeria, Sudáfrica, Ghana o Kenia, donde pueden ser reaprovechados por aquellas personas que no tienen tantos recursos. El móvil más demandado está firmado por Nokia y responde a la nomenclatura de 2310 y 1100, terminales especialmente reconocidos por su longeva batería, linterna y radio.
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