No lo dice la gran masa de internautas que está en contra de la Ley de Economía Sostenible (LES). Lo dice la Federación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) y Michele Boldrin, economista y catedrático de la Universidad Washington (San Louis): La ‘Ley Antidescargas’ no es la más adecuada para terminar con el problema de la ‘piratería’ en Internet. Ambos han presentado el ‘Informe sobre la Industria de la Música’, un documento que pone de relieve la inutilidad de la Ley de Economía Sostenible, puesto que según ellos no puede aportar nada a la transición que debería experimentar este nuevo modelo de negocio. El propio Boldrin ha afirmado en la presentación que el Gobierno español le está haciendo, con esta ley, el trabajo sucio a las discográficas.
Dicen que es una forma antigua de acabar con la piratería y que el verdadero trabajo del artista está en ejecutar conciertos. Como no podía ser de otra manera, los expertos no se han quedado en la exposición del problema, no. El ‘Informe sobre la Industria de la Música’ propone como solución que los grupos y artistas manden sus canciones de forma directa a puntos de venta como Amazon o iTunes. Durante tres años, como máximo, podrían contar con ingresar por derechos. De esta forma, ganarían menos por cada disco vendido pero su difusión sería tamaña y eso siempre sería positivo para aquellos que quieren salir frecuentemente de gira.
Cierto es que en el informe se alude directamente al hecho de que la industria discográfica no haya tolerado nunca los avances tecnológicos que podían modificar su posición de monopolio. En este sentido, la nueva legislación no evidencia grandes cambios al respecto, sino que pone en pause un problema que requiere de una solución urgente para todas las partes implicadas. Según ha explicado Michele Boldrin, la clave está en rebajar los 90 años de derechos autor para quedarse sólo en tres, período en el que los artistas venden más copias de sus éxitos.
El error radica en la persecución de páginas webs que ofrecen enlaces musicales, cosa que ya ha sido considerada legal por varios jueces en nuestro país. Dicen que el Gobierno debería dedicarse a pensar en dar soporte a un nuevo modelo de negocio, acorde con las circunstancias tecnológicas, en lugar de apoyarse en legislaciones chapadas a la antigua o convertirse en abogado del diablo. La música en vivo ha crecido, muy a pesar de que las ventas de discos hayan bajado. Un síntoma más de que algo está cambiando.
Fotos de: Eelke de Blouw, Greg Nissen y StuartPilbrow
ni 90,ni 50… pero 3… me parece demasiado poco, quizá 12 para mi seria el numero adecuado
Pues aunque las prácticas de la SGAE me parecen despreciables (no creo que quede mucha gente que les apoye, quitando los pocos que realmente salen beneficiados de todo ese tema), aún así voy a hacer un poco de abogado del diablo sobre el tema de "los músicos tienen que vivir de los conciertos".
Ese es un argumento muy cómodo que se lleva esgrimiendo años para poder seguir bajándonos todo lo que nos apetezca sin remordimiento alguno ;-). Incluso tiene su lógica, en principio. Pero… ¿Qué pasa en el caso de las películas? ¿Los actores también se van a tener que ir de gira haciendo actuaciones "en directo" de sus películas? ¿Con efectos especiales y todo? xD
¿Y qué hay de los escritores? ¿Y los dibujantes de comics? ¿Y los desarrolladores de software? ¿Y los diseñadores, músicos, y artistas de todo tipo que participan en un videojuego? ¿Todos ellos también tienen que irse a dar "conciertos" porque vender su trabajo en tiendas es "obsoleto"? 😉