El iPad de Apple no sólo está de actualidad por el zarandeo que le ha dado al sector tecnológico con su presentación. Ya empiezan a crecerle los enanos, o, mejor dicho, ocurre a la inversa. Y es que la japonesa Fujitsu no ha tardado más de 24 horas en reclamar como suya la propiedad de la marca comercial iPad que la compañía de Steve Jobs ha usado para bautizar el tablet que todo el mundo conoce ya con nombre propio.
Pero no es el único caso. La multinacional franco-italiana productora de electrónica STMicroelectronics también se declara propietaria de los derechos de explotación de la marca iPad en Europa. El culebrón alcanza cotas de absurdo, ya que la propia STMicroelectronics es la proveedora de los acelerómetros del iPhone de Apple. En este caso, la compañía europea registró en el año 2000 la marca de iPad asociada a «componentes ligados a la nueva tecnología, particularmente aquellos que están ligados a la telefonía móvil, los ordenadores y periféricos», según informa el portal bursátil Bloomberg.
En este caso, presumiblemente Apple será capaz de alcanzar un pacto para la distribución comercial del iPad en Europa, cuyo aterrizaje está vetado por la protección que ejerce STMicroelectronics sobre la explotación de la marca en el Viejo Continente. Más complicado lo van a tener con Fujitsu. La japonesa es la dueña de la marca en Estados Unidos desde 2003, que en la actualidad está aplicada a unos cajeros de supermercado que funcionan sin intervención humana.
Desde la compañía japonesa esperan con los despachos abiertos la llegada de los abogados de Apple, que iniciaron la tramitación del registro de la marca en Trinidad y Tobago, según informa El País, al igual que hicieron como paso previo a la presentación del iPhone. De cualquier forma, el copyright de iPad está en manos de Fujitsu, y ahora Apple tiene hasta el 28 de febrero para mover ficha (que pasa por pagar la transferencia de los derechos de explotación de la marca a la japonesa). Gran negocio el del copyright.
Vía: Bloomberg / La Tribune