La nueva PS4 Pro se puso a la venta en España el pasado día 10 de noviembre y ya se habla de cifras récord de ventas de la nueva máquina de Sony. Muchas tiendas especializadas aprovecharon la ocasión para lanzar sus planes de renovación, para que la nueva consola saliera más económica a los futuros compradores. Sin embargo, todavía son muchos los que se preguntan si realmente vale la pena comprar una PS4 Pro, incluso muchos usuarios todavía no tienen demasiado claro las diferencias entre la PS4 Pro y la PS4 Slim, que se puso a la venta solo unas semanas antes. Por ello hemos querido aclarar qué mejoras encontraremos si optamos por una PS4 Pro en lugar de una PS4 Slim.
La PS4 Pro llega con una premisa clara: ser la primera consola con la que se podrá jugar con resolución 4K. Y precisamente esa es la gran mejora que trae la PS4 Pro frente a la PS4 Slim o la PS4 «normal». Teniendo una PS4 Pro, y si el desarrollador del juego así lo quiere, podremos jugar con una mayor resolución y, por tanto, con una calidad gráfica superior a lo que podremos ver en una PlayStation 4. Para conseguirlo, la PS4 Pro incluye un hardware mejorado, especialmente en el apartado gráfico. La nueva consola de Sony tiene una potencia de 4,20 Teraflops, frente a los 1,84 Teraflops de la PS4 normal. Se ha aumentado también la velocidad del procesador, pasando de 800 MHz a 911 MHz; y se ha cambiado la memoria RAM por una más rápida, además de incluir 1 GB de memoria DDR3 para tareas del sistema.
Con estos cambios Sony ha conseguido que su nueva consola sea capaz de ejecutar juegos con resolución 4K, o al menos algo parecido. La propia compañía ha reconocido que si los desarrolladores quieren implementar una resolución 4K nativa en uno de sus juegos, tendrán que penalizar en el número de fps, ya que la potencia de la consola no es suficiente para jugar con resolución 4K nativa y un nivel alto de fps. Para solucionarlo, Sony ha desarrollado un método de escalado llamado “checkboarding” que, según la compañía japonesa, consigue una calidad de imagen muy similar al 4K nativo sin necesidad de penalizar el rendimiento de los juegos. Un método que la propia Sony ha aconsejado utilizar a todos los desarrolladores de juegos para PS4 Pro.
Otra de las novedades que podremos disfrutar en PS4 Pro y no en PS4 Slim o PS4 será la reproducción de vídeo en streaming con resolución 4K. La PS4 Pro permite reproducir vídeo con resolución 4K y HDR desde plataformas como Netflix o YouTube.
¿Y qué pasa con el sistema HDR, también es una mejora de la PS4 Pro? En realidad, Sony ha implementado el soporte para imágenes HDR tanto en PS4 Pro como en PS4 Slim o incluso PS4, así que esta mejora no es exclusiva de la nueva consola. Otra cosa es que los desarrolladores decidan que solo habilitarán la opción de utilizar el HDR si estamos ejecutando el juego en resolución 4K con una PS4 Pro. Sin embargo, algunos títulos que ya están disponibles, como Uncharted 4, ya han comunicado que lanzarán un parche con gráficos HDR tanto para la PS4 Pro como para la PS4.
Debemos tener en cuenta que para disfrutar de las ventajas que ofrece la PS4 Pro necesitaremos un televisor preparado. Es decir, nuestro televisor tendrá que ser compatible con la resolución 4K y con las imágenes HDR. En un televisor Full HD los juegos se verán algo mejor, pero no conseguiremos apreciar la gran mejora que promete Sony.
