250.000 euros. Esa es la cifra que está intentando recaudar una empresa española para conseguir producir la que sería primera consola portátil que sería diseñada y fabricada en España. En este dispositivo portátil, además, la idea es poder jugar a los juegos de PC. Llegaría en 2017 si consiguen recaudar la cifra comentada anteriormente.
La start up que ha ideado este proyecto se llama Smach Team, y tiene su sede en Mallorca. Su intención es lanzar en 2017 la primera consola portátil para juegos que han sido desarrollados para PC. Y además, sería desde España para el resto del mundo.
Esta consola portátil, que contaría con un sistema Windows, permite que juguemos a cualquier juego de PC o hasta de la plataforma Steam. Muy importante este último punto, sobre todo por la gran biblioteca de juegos que tiene esta plataforma online con 3.500 títulos en su haber.
Será el próximo 18 de octubre cuando comience la campaña de financiación para Smach Z en Kickstarter. El objetivo es conseguir los 250.000 euros para dar comienzo a la fabricación de la consola portátil.
Un prototipo con pantalla táctil
Sus creadores aseguran que esta consola tiene una calidad gráfica superior a la de las portátiles actuales. Cuenta, además, con un chip AMD de cuatro núcleos a 2,1 GHz de última generación algo que nos permitirá jugar con la mayor fluidez posible.
En cuanto a la pantalla, llega con un display táctil de seis pulgadas con resolución Full HD, 4 GB de RAM -que serán 8 GB en la versión Pro– y un total de 64 GB de disco duro -que será de 128 en su versión Pro-. Como corre Windows en cuanto al sistema operativo, podremos usar todas las funciones de un PC en la consola portátil. Desde ejecutar programas, hasta navegar por la red, o ver archivos multimedia.
La idea es producir unas 3.000 unidades en su inicio que cubrirían así la demanda de Kickstarter. Pero el objetivo marcado en la hoja de ruta es que se pueda comercializar a través de su propia página web para finales de 2017 o como tarde a principios de 2018.
Si todo sigue lo establecido y lo que se ha puesto en papel, la idea es comercializar unas 150.000 unidades. Sin duda, un proyecto sumamente ambicioso y que generaría una facturación de más de cincuenta millones de euros.
Por otro lado, la empresa -que ha recibido una primera inversión de una incubadora de proyectos, y de más premios- ha invertido ya más de 150.000 euros en el desarrollo de su primer prototipo y destinarán 300.000 para el diseño y puesta a punto de la versión final de la misma.
Así que el próximo 18 de octubre empezará la campaña en Kickstarter para intentar recaudar los 250.000 euros necesarios para su fabricación. Todo aquel que quiera colaborar puede hacerlo invirtiendo 299 euros en su versión básica o 499 para conseguir la versión Pro. Si logran el objetivo, la idea es que los mecenas reciban ya la Smach Z en primavera de 2017 en sus casas.
