zed bancarrota

Oí­do cocina. Déjemelo a mí­. Voooy. Oki doki. Voy para allᔦ más de uno recordará las frases del boina verde, el conductor o el experto en explosivos del juego Commandos. Un tí­tulo que sorprendió a medio mundo tanto por su mecánica y diversión como por su origen. Y es que se trata de un juego español desarrollado por Pyro Studios. La empresa, creada en 1996 por la familia Pérez Dolset, fue una de las grandes pioneras en el ámbito de la tecnologí­a en España. Pronto llegarí­an nuevos nombres, más internacionales y el apoyo de otras empresas, reconvirtiéndose finalmente como Zed Worldwide. Entidad que podrí­a estar a punto de entrar en concurso de acreedores, como informa El Confidencial.

Así­ lo han solicitado ING, HSBC y Alfa Bank, principales acreedores del grupo (aunque no los únicos: Banco Santander y Grupo Planeta), y quienes ahora (el pasado 29 de julio) piden en el Juzgado de lo Mercantil número 2 de Madrid el preconcurso de acreedores para esta compañí­a tras dos años de impagos. Y es que, después de una vida de vanguardia tecnológica y crecimiento económico, parece que Zed Worldwide, está en la bancarrota tras fallidos acuerdos y todo un culebrón empresarial desde 2014.

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Javier Pérez Dolset (Zed)

Según varias fuentes, los problemas de Zed Worldwide comenzaron con el impago de uno de los tramos de un préstamo en diciembre de 2014. Al parecer, Zed no pudo llevar a cabo el pago de 9,4 millones de euros tras enfrentarse a limitaciones especí­ficas de las jurisdicciones donde opera el grupo, según sus declaraciones. Estas limitaciones llegaron tras la investigación solicitada por dos accionistas sobre la gestión del consejero delegado, Javier Pérez Dolset, por lo que la empresa no ha llegado a reponer los 140 millones que sumaba el total del préstamo.

La solución a este problema llegarí­a por la venta de la empresa Zed+ al grupo chino Down Galaxy, con el que ha llegado a varios preacuerdos. Sin embargo, el trato no se ha cerrado, manteniendo las deudas y el acoso de los acreedores, quienes decidieron finalmente ordenar el preconcurso de acreedores. Ahora, para ganar tiempo, la familia Pérez Dolset ha solicitado el preconcurso voluntario, consiguiendo un plazo de cuatro meses para negociar directamente con el juez las condiciones. Eso sí­, según fuentes cercanas, los Pérez Dolset seguirí­an buscando el acuerdo con Down Galaxy para poder evitar el concurso de acreedores. El plazo acaba a finales de noviembre.

Malas compañí­as

Como relata El Confidencial, algunas fuentes afirmarí­an que la petición del concurso de acreedores podrí­a estar motivada por Mikhail Fridman, un empresario ruso con el que la familia Pérez Dolset se asoció, y con quien han tenido sendos cruces de denuncias. Al parecer, los empresarios españoles descubrieron que Fridman desviaba dinero por sobornos a familiares de polí­ticos rusos y al dictador de Uzbekistán con el fin de conseguir licencias para sus empresas. Algo por lo que han sido multadas por la justicia estadounidense y holandesa. Friedman, que es fundador y consejero de Alfa Bank (entidad que ahora reclama el concurso a Zed Worlwide), podrí­a ser uno de los interesados en que no se lleve a cabo el acuerdo con los chinos Down Galaxy.

Pioneros españoles en tecnologí­a

El mencionado tí­tulo Commandos consiguió ser número uno en más de 25 paí­ses de todo el mundo, y logrando la cifra de cinco millones de copias vendidas. También cuentan como logro en su haber la pelí­cula Planet 51. Un largometraje de animación producido por una de sus empresas que logró ser récord en taquilla en 2009 como la pelí­cula española más vista a nivel mundial, y que también fue la pelí­cula española con más presupuesto de la historia, sumando 55 millones para su realización.

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