Tal y como prometieron el mes pasado, Uber ya empieza a circular con sus primeros coches autónomos por las calles de Pittsburgh, Pennsylvania. El Ford Fusion Energi ha sido el modelo elegido para esta andadura que arranca en Estados Unidos. El vehículo, que estará circulando las 24 horas al día, ofrecerá el servicio regular de UberX a todos los usuarios que hayan aceptado la propuesta de participar en esta beta pública. Por ahora, la compañía no ha concretado una fecha para que el servicio esté operativo al cien por cien. Por otro lado, la implementación de este proyecto a otras ciudades o países aún se desconoce.
Hace un año aproximadamente que Uber inauguraba la creación de un Centro de Tecnologías Avanzadas en colaboración con la Universidad de Carnegie Mellon, destinado a al desarrollo de una tecnología de conducción autónoma. De hecho, por aquel entonces, ya se informó de que la compañía estaba probando esta tecnología en Pittsburgh. En cualquier caso, es ahora cuando se ha hecho oficial: Uber ha puesto a circular su primer coche autónomo por esta localidad estadounidense. Para esta aventura, Uber ha confiado en Ford, más concretamente en el Fusion Energi, un coche muy bien equipado, que incluye escáneres láseres, cámaras de alta resolución, radares, que le dan la posibilidad de mapear entornos, crear rutas diferentes y conocer todo lo que hay en el entorno para, de este modo, reaccionar ante cualquier imprevisto.
Durante esta beta abierta, los vehículos dispondrán de un conductor que sólo actuará en caso de una emergencia, además de un ingeniero que se sentará en el asiento del copiloto, y que estará grabando durante todo el viaje, registrando datos para posteriores estudios. Por otro lado, por seguridad, en caso de que el tiempo no sea favorable, llueva o nieve, no se permitirá que los coches salgan a la calle en ninguna de estas circunstancias. Asimismo, los coches autónomos de Uber estarán circulando durante todo el día entero por las calles de Pittsburgh, lo que significa que no habrá una limitación de tiempo por parte del conductor, tal y como ocurre hoy en día. De este modo, la demanda de nuevos conductores se reducirá dependiendo del aumento de la flota de vehículos que se vayan uniendo al servicio.
Poco a poco la conducción autónoma está dando grandes pasos. Uber es una de las pocas compañías que hacen oficiales sus avances. El objetivo de todas ellas es el de garantizar la seguridad, reducir los accidentes de tráfico en las ciudades y liberar en un amplio porcentaje el aparcamiento en las zonas más pobladas. Una de las grandes pioneras de esta tecnología es Google. Su proyecto arrancó en 2009, bastante antes de que los fabricantes de automóviles y la mayoría de las empresas consideraran esta tecnología como una alternativa seria. A día de hoy, los de Mountain View todavía tienen un sistema imperfecto y ningún camino claro para llegar al mercado. El tiempo dirá.