Según los rumores, el próximo día 9 de septiembre Apple presentará sus nuevos iPhone. Este año la compañía podría volver a anunciar dos nuevos modelos, que muy posiblemente serán bautizados como iPhone 6s y iPhone 6s Plus. Conforme se va acercado el día de su puesta de largo vamos conociendo parte de sus características, de hecho el iPhone 6s acaba de pasar por una prueba de rendimiento arrojando nuevas pistas sobre sus capacidades.
Los resultados del Geekbench 3 no dejarían muy bien parado al dispositivo, denominado en el test como iPhone 8,2. El dato que más llama la atención, es que el nuevo alta gama de Cupertino llegaría con 1Gb de RAM. Hasta la fecha todos los rumores coincidían en que Apple tenía previsto duplicar la cantidad de memoria en sus nuevos iPhone, pasando de 1GB a 2GB. Según lo que se ha podido ver, gracias a este famoso benchmark, la compañía no tendría previsto aumentarla en sus nuevos modelos. ¿Lo dejaría ya para el iPhone 7? Lo que sí parece claro, es que Apple estrenaría su chip A9 de 14 nm en sus nuevos teléfonos, un procesador que trabajaría a 2 Ghz.
Por su parte, queda confirmada la presencia de iOS 9 en el terminal, una información que era más que evidente. Algunos medios aseguran que quizá la intención de Apple sea la de diferenciar algo más su teléfono estándar de la variante «Plus«, tal y como hacen algunas compañías. Es decir, que no sólo ambos se distancien en tamaño de pantalla o algunas capacidades mínimas, si no también en prestaciones importantes como memoria o procesador. Si pensamos de esta manera no sería descabellado que sea el iPhone 6s Plus el que llegara con los 2GB de RAM.
Por el momento estos son los únicos datos técnicos que arroja este test de rendimiento. Si recopilamos la información de algunas de las últimas filtraciones, tenemos que los nuevos iPhone también contarían con una pantalla con mayor resolución, aunque parece que ésta seguiría situándose en las 4,7 y 5,5 pulgadas, el mismo tamaño que tienen los actuales iPhone 6 y iPhone 6 Plus. Por lo demás, ambos dispositivos equiparían una cámara principal con un sensor de 12 megapíxeles. Además, se habla de nuevas funciones que aumentarían su potencia a la hora de capturar fotografías.
Sobre su diseño aún no se sabe demasiado, aunque parece que Apple reforzaría el chasis en sus nuevos iPhone incorporando el material Aluminio Serie 7000, presente en el Apple Watch. Además, parece que se eliminarían las rayas ubicadas en la parte trasera del dispositivo, disponibles para no tener problemas con las conexiones. Otra de las funciones que parece que se incluiría en los teléfonos es la tecnología Force Touch, también disponible en el reloj inteligente de la firma y en su nuevo MacBook. Esta tecnología permite que podamos acceder a diferentes funciones del equipo presionando la pantalla de una determinada manera. Pese a no tener muchos más datos, falta muy poco para salir de dudas y conocer de manera oficial cómo son exactamente estos nuevos dispositivos.